Más de 3.000 árboles se siembran en fincas ganaderas de Cundinamarca para recuperar bosques y tener una base alimenticia rica en nutrientes para los animales.
Los productores ofrecen su mano de obra para plantar las especies que ofrecen el Comité de Ganaderos de La Dorada, en Caldas, y Unidad Especial de Bosques de Cundinamarca.
En total son 1.600 árboles maderables que se sembrarán y 1.500 leucaenas en las parcelas a una distancia de 12 metros cada uno.
La siembra comenzó hace 2 semanas en los municipios de Guaduas, Puerto Salgar y Caparrapí.
En los 3 municipios se sembrarán más especies arbóreas para reforestar los bosques.
León Esteban Arango, profesional de gestión de proyectos estratégicos de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, en La Doranda, indicó que la siembra del material vegetal está en manos de los ganaderos comprometidos con el negocio productivo.
Los árboles que se siembran son leguminosas ricas en nutrientes para las reses, lo que contribuye con la ganadería sostenible, es decir aquella que como eje central de la producción promueve el cuidado del medio ambiente mientras los rumiantes se alimentan de las mejores especies vegetales.
Andrés Zuluaga Salazar, coordinador general del proyecto Ganadería Colombiana Sostenible de Fedegán, aseguró que los bovinos encuentran en los forrajes proteínas, carbohidratos solubles y nutrientes.
Como ventaja, aseguró, que los árboles que conforman los forrajes tienen frutos y hojas con más proteínas, lo que ha desencadenado en el éxito de los sistemas silvopastoriles en Colombia y en otros países, al comprobarse que constituyen un alimento esencial para la ceba de los animales con producciones de leche y carne de calidad.