Cada productor debe observar con atención cuáles especies de árboles y arbustos nativos regeneran espontáneamente en su finca, porque el manejo de la regeneración natural es la forma más fácil y económica de transformar los potreros sin árboles en sistemas silvopastoriles.

Así lo plantea el Centro para la Investigación en Sistemas Sostenibles de Producción Agropecuaria (CIPAV) en una publicación en la que destaca que es conveniente aprovechar el potencial del ganado mismo para dispersar semillas de árboles nativos. Si las semillas se mezclan en el suplemento o la sal mineralizada de los animales, muchas de ellas germinarán en las excretas donde las plántulas tendrán una oferta adecuada de nutrientes y agua durante la fase de establecimiento en el potrero.

Los ganaderos pueden lograr una reducción importante en sus costos de producción al abandonar o racionalizar el uso de los herbicidas que detienen el proceso natural de sucesión ecológica.

Las plantas nativas ofrecen recursos claves para la fauna silvestre. Por esto es importante plantar algunas palmas, árboles y arbustos en las cercas vivas, o conservar aquellas plantas que regeneran en el sitio. En los climas húmedos, se observa una regeneración muy vigorosa debajo de las cercas vivas.

Es importante que los ganaderos dejen de ver esta vegetación como evidencia de abandono y valoren la contribución de estas plantas a la biodiversidad. (Lea: Árboles nativos en los sistemas ganaderos colombianos)

La propuesta tiene similitud a lo que ocurre con la función de las aves de transportar las semillas. Las aves facilitan el proceso de establecimiento de especies forestales y, por ende, la recuperación de los bosques.

Un artículo de Inecol (La dispersión de semillas por aves y la recuperación del bosque mesófilo de montaña) señala que una de las mayores ventajas que confiere la dispersión de semillas por aves, es que el paso de la semilla por su tracto digestivo elimina o debilita la cutícula o estructura externa (proceso conocido como escarificación), lo que en muchos casos incrementa la proporción y velocidad de la germinación de semillas de ciertas especies.

No hay que olvidar que, además de las anteriores bondades, al utilizar los bovinos como vehículo de dispersión de especies nativas, los árboles les proveen a los animales sombra que es un beneficio del bienestar animal, así como los nutrientes cuyo suministro de vuelve crítico en épocas de sequía o de mucha lluvia, o por una baja disponibilidad por factores externos al sector como es el caso de la guerra en Ucrania

Además, tal como señalan expertos, las flores y frutos de las diferentes especies nativas pueden proveer principios activos a las dietas de los animales como una especie de prebiótico para lograr modular su microbioma, los microorganismos presentes a nivel gastrointestinal y al hacerlo balancear y reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero en más de 30 %.