La médica veterinaria peruana Lelia A. Sánchez Hidalgo, jefe de Sanidad de Agrovet Market Animal Health, describió en qué consiste un proceso de desinfección en los centros de producción y los diferentes grupos de productos para garantizar un ambiente libre de patógenos.

En el año de la pandemia, no hay duda de que uno de los aspectos que mayor relevancia ha cobrado es la prevención del ingreso de enfermedades a los centros de producción, aunque este ya hacía parte de la sanidad animal.

La limpieza y desinfección de superficies son esenciales, pero la complejidad de estas acciones que se deben hacer diariamente son “frecuentemente infravaloradas”. (Lea: Después de limpiar, hay que realizar la desinfección del vehículo) 

Es importante contar con un buen programa de bioseguridad para ayudar a reducir el número de patógenos. Hay que tener en cuenta que la limpieza que precede a la desinfección es el factor más importante en la eficacia de los distintos protocolos.

Explicó que la desinfección como parte de la bioseguridad constituye un arma eficaz en la lucha contra las enfermedades, pues es el proceso mediante el cual se destruye o inactiva, dentro de un tiempo determinado, la presencia de microorganismos patógenos.

Para realizar el proceso de desinfección se utilizan distintas sustancias químicas, las que se conocen como desinfectantes. Los desinfectantes actúan sobre los microorganismos y sus procesos celulares vitales, mediante el control de su multiplicación o eliminando al agente.

Este agente debe ser capaz de demostrar su efectividad contra patógenos determinados y ser lo más específico posible en su aplicación, de manera que un productor pueda elegir la mejor opción. (Lea: Siga estas pautas para realizar la limpieza de los vehículos en las fincas)

Existen varios grupos de desinfectantes, los principales que son usados en medicina veterinaria son los siguientes: ácido clorhídrico, ácido acético, ácido cítrico, alcoholes, aldehídos, álcalis, halógenos, agentes oxidantes, compuestos fenólicos y amonios cuaternarios.

Como agentes oxidantes, están los compuestos a base de peróxidos, como el peroximonosulfato de potasio, que ofrece un amplio espectro de eficacia con enfoque específico en los organismos que causan enfermedades virales.

Los amonios cuaternarios representan una familia de compuestos antimicrobianos considerados como agentes activos catiónicos potentes para eliminar bacterias grampositivas y gramnegativas, aunque estas últimas en menor grado, así como hongos y virus.

Entre los amonios cuaternarios está el cloruro de benzalconio que es activo contra bacterias grampositivas; el cloruro de didecil dimetil amonio, que tiene una actividad germicida superior, no produce espuma y presenta una alta tolerancia a las cargas de proteína y al agua dura.

Los aldehídos son una clase de compuestos orgánicos que resultan de la oxidación simple de los alcoholes. Actúan mediante la alquilación de los grupos químicos de las proteínas y ácidos nucleicos de las bacterias, virus y hongos.

Los alcoholes son compuestos orgánicos del agua que actúan destruyendo la membrana celular y desnaturalizando las proteínas. Poseen una rápida acción y amplio espectro, actuando sobre bacterias grampositivas y gramnegativas, incluyendo micobacterias, hongos y virus.

Los alcoholes asociados a otros productos, como amonios cuaternarios, tienen añadido el efecto de acción característico de estos compuestos, potenciándolos. Los más usados son el etanol y el isopropílico, que tiene un poder desinfectante superior al primero, es menos volátil y corrosivo.

Combinar productos químicos para desinfectar tiene algunas ventajas: ampliación del espectro antibacteriano, reducción de las propiedades tóxicas o agresivas de cada desinfectante, mayor persistencia en la superficie tratada y potenciación del efecto propio de cada componente, entre otros.

La eficacia de estos productos se comprueba con controles químicos y bacteriológicos para valorar el resultado final de la desinfección, aunque son costosos y laboriosos. (Lea: Conozca el protocolo de limpieza y desinfección de instalaciones y vehículos de ganado)

Con el uso de desinfectantes adecuados y manteniendo una constante rutina de desinfección, se contribuirá a la eliminación de los agentes patógenos o la reducción considerable de superficies contaminadas, con lo cual también se previene la propagación de enfermedades.