La protesta de los productores y entidades lecheras del país relacionada con la baja del precio de la leche y el recorte del cupo de compra por parte de Alpina, avivó el debate en las redes sociales. Al respecto el presidente ejecutivo de Fedegán explicó la difícil y controversial situación que se está viviendo.
En el programa de 6AM Hoy por Hoy de Caracol Radio, José Félix Lafaurie Rivera, presidente de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, manifestó que se han importado en extremo productos de origen lácteo, pues hoy ya se tienen 42 mil toneladas, en gran porcentaje por parte de la industria transformadora, que ha traído como consecuencia la disminución de captación de leche cruda en Colombia. (Lea: Precio de leche: Alto en estadísticas, bajo en ganancias para ganaderos)
“El país por cada dos litros de leche fresca que produce, la industria solamente alcanza a transformar 1 litro, es decir, tenemos abundante leche cruda que por lo general va al mercado de manera informal, además violentando las normas de inocuidad del producto. Ante esto, la industria se ha acomodado en nicho y le permite tener abundante leche fresca en Colombia para atender sus necesidades en materia de capacidad instalada, incluso en las épocas de verano”, expresa el dirigente gremial.
Sin embargo cuando hay una cantidad tan alta de importación con más de 40 mil toneladas, se está hablando de más del 5 % del total de la leche que se produce en Colombia, es decir, “estamos hablando prácticamente del 10 % de lo que la industria transforma”, sostiene Lafaurie Rivera.
El dirigente de Fedegán asegura que esto es producto “del proceso de desgravación que han tenido gracias a los TLC la importación de estos productos, y además a que el arancel de protección es muy bajo como consecuencia de estos tratados.
"Llevamos más de 10 años planteando soluciones pero no he visto que ni los gobiernos ni la industria se haya sentado a mirar este asunto, pues evidentemente la leche en polvo es un commodity, con una fluctuación de precios en los mercados internacionales muy alto”. (Lea: Espaldarazo del Gobierno a productores de leche)
Situación de Alpina
En cuanto a la situación coyuntural de Alpina, Lafaurie Rivera explica que “esta es una empresa sustantiva para el encadenamiento producto. Alpina es el segundo comprador de leche más importante del país, por lo que creo que las redes simplemente simplificaron el tema y pusieron este desastre en cabeza de esta empresa y no es así. Alpina está diciendo en la carta que aquí hay otros procesadores muy grandes que han importado dos o tres veces más que ellos y no han tenido la misma inclemencia por parte de los actores que han tratado de estigmatizar a la empresa”.
Sin embargo aquí hay una sensibilidad muy importante porque se importaron muchas toneladas de leche, lo que ha generado que el problema se empeore y genere gran preocupación y controversia en el país y en quienes hacen parte de la cadena.
“En Colombia quienes están consumiendo productos transformados son los estratos altos con más o menos 180 litros per cápita, mientras que en Europa y Estados Unidos se consumen 500 litros per cápita, pero los estratos bajos –el 1 que es el más amplio de Colombia– consume 34 o 35 litros, mientras que el estrato 2 absorbe 54 litros, es decir, son 30 millones de colombianos que no están consumiendo la proteína de origen animal transformada y en condiciones adecuadas de acuerdo a las normas que ha expedido el gobierno”, indica Lafaurie Rivera.
Por esta razón el representante de los ganaderos expone que hay que hacer algo para preservar este nicho, pues no se encuentra bien atendido porque no se está haciendo nada para llevar productos lácteos a los sectores populares de Colombia.
“En esta coyuntura las sensibilidades son muy criticas y en el caso de Alpina terminó llevándose la peor parte”, expresa Lafaurie Rivera, quien además dice que “en Colombia hay un remanente no procesado de 3.400 millones de litros de leche. Es un problema estructural; y lo que la industria procesadora compró son más de 400 millones de litros en cuatro meses, es decir si sigue al mismo ritmo podría terminar comprando 1.000 millones de litros”, sostiene Lafaurie.
El dirigente asevera que cada eslabón tienen que ver varios puntos como que la industria hoy en día está vendiendo leche con valor agregado como los quesos maduros que no podrán competir con los quesos extranjeros, pues para 2022 y 2026 queda prácticamente desgravado con Europa y Estados Unidos. (Lea: Gravar la ganadería, una propuesta que desconoce realidad del sector)
Lafaurie Rivera concluye que “hoy están poniendo una cantidad de productos importantes en los nichos de altos precios, que van a competir con ellos, por lo que es el momento de revisar una estrategia que permita permear sectores que no están bien atendidos como los populares”.