El anestro en la vacas de carne está determinado por tres factores como son condición corporal, balance energético y amamantamiento, según el médico veterinario y PhD en reproducción animal, Gustavo Decuadro-Hansen.
Durante una charla organizada por TVGan el experto señaló que para luchar contra esto hay diversas herramientas como hacer un destete precoz de los terneros a los 60 días para evitar que la vaca sea amamantada y comience a ciclar otra vez.
Otra opción es un destete temporal, en general de once días, lo que va a permitir que la vaca por mecanismos hormonales vuelva a ciclar; y, una tercera alternativa es el uso de lo que se llama la tablilla que es una posibilidad que se tiene de dejar los terneros con las vacas y colocarle una tablilla para evitar que amamanten. (Lea: ¿Cómo evitar los anestros en su finca?)
El impedir ese amamantamiento va a permitir que la secreción hormonal se evite y el animal vuelva a ciclar.
Este tipo de técnicas se pueden maximizar usado protocolos hormonales así como mecanismos de alimentación pre y posparto ya sea oral o inyectable, señaló.
Una forma de diagnosticar el anestro en ganado de carne es por medio de la ecografía que permite observar el estado de los ovarios.
Para aumentar los kilos de terneros destetados se cuenta con tres posibilidades: servicio precoz de vaquillas, aumentar porcentaje de destetes o aumentar peso al destete.
No obstante, dijo, estas tres técnicas diferentes tienen un costo importante y no se pueden aplicar en todas las fincas.
Mostró un ejemplo de dos fincas con 300 vacas cada una que se inseminan y en la primera se tiene 55 % de destete mientas en las segunda se logra 75 % y se observa que el número de terneros producidos es diferente, en la primera se tienen 165, si se desteten a 200 kilos, con una buena genética se producen 33.000 kilos de carne. En el segundo caso se logran 225 terneros y 45.000 kilos de carne. (Lea: Lo que usted debe saber sobre el anestro lactacional)
Por eso, lo importante es aumentar el porcentaje de destete con técnicas como la Inseminación Artificial a Término Fijo (IATF) o la mineralización inyectable que aumenta el peso al destete porque en este caso el costo es muy elevado.
En el caso de la ganadería de leche, hoy día a nivel mundial, se tienen establecimientos cada vez mayores, con incremento y volatilidad en los precios, consumidores cada vez más preocupados por el medio ambiente, presencia de leches vegetales, mudanza climática, y ahora la COVID.
El contexto reproductivo del ganado lechero hoy día es muy diferente entre holstein raza pura frente al de los cruzamientos.
En vacas lecheras se tienen dos problemas reproductivos grandes, sobre todo en holstein, por un lado la detección del celo en el posparto sabiendo que hoy día cerca del 60 % del celo en le holstein tiene menos de ocho horas y en cualquier finca lechera después de pasar el periodo de espera voluntario se está con un 25 % de las vacas en anestro.
El segundo problema es que se tiene una tasa de concepción reducida post inseminación artificial o monta lo que habla que la fertilidad de la inseminación es mala ya sea porque el semen no es bueno o porque el momento de la inseminación no es bueno o la vaca perdió su gestación después de haber sido inseminada. (Lea: 3 métodos para sincronizar los celos en vacas)
Dentro de las ayudas que se tienen para aumentar el porcentaje de destetes o mejoras en la tasa de detección de celo o en la reducción de las pérdidas gestacionales está la mineralización que tiene un gran impacto en la eficiencia en la producción de ganado bovino.
Hoy día las fuentes vienen de pasturas que son deficientes sobre todo en tres minerales como son el fósforo, el selenio y el cobre. La suplementación frecuentemente se hace vía oral, sin embargo hoy día está la opción de hacerla inyectable que es de fácil aplicación, rápida absorción, garantiza minerales en fases críticas y es un complemento a la suplementación oral.
En el preparto, el destete, antes de una inseminación, en el periodo de espera voluntario de una vaca lechera y en general cuando se precisa de una ayuda con minerales críticos, la utilización de productos inyectables es de gran ayuda.
Hoy día se tienen épocas de desafío de estrés en las pasturas complementada con alimentación mineral pero cuando esa situación de desafío nutricional o de estrés en el animal está alterando al bovino se afectan los sistemas fisiológicos normales, se impacta el sistema inmune y las consecuencias son a nivel de la ingesta de alimentos con las repercusiones secundarias de enfermedades ya sean infecciosas o parasitarias y la ineficiencia reproductiva que ello conlleva.
Las causas de baja eficiencia reproductiva tienen que ver con la repetición de celo, mortalidad embrionaria o abortos, lo cual es diferente si se trata de ganado de carne o de leche. (Lea: La tasa de detección de celo (TDC))
En el caso del ganado de carne el problema número uno es el anestro, una vez que la vaca está en celo y que está inseminada con semen de buena calidad y que se logra la gestación, la pérdida por mortalidad embrionaria es muy reducida, no supera el 6 %. Si supera esta cifra es probable que haya enfermedades infecciosas o un gran impacto alimentario.
En ganado de leche es diferente. Si se hace un control de gestación el día 30 y se repite al día 60 es muy frecuente que se pierda hasta el 25 % de la gestación.