Esta es una de las enfermedades parasitarias que más prevalecen en predios de trópico alto durante la temporada de lluvias que altera el ganado bovino y se transmite por medio de caracoles sobrevivientes en zonas húmedas.
El caracol es el enemigo del ganado bovino en esta época del año por el exceso de agua que forman charcos o pozos, sitios donde habita el animal que desencadena en la fasciola, patología que pone en riesgo la productividad del hato al alterar el hígado de los rumiantes.
El hígado es considerado uno de los órganos más importantes en el mantenimiento de la homeostasis metabólica en los animales, concepto que hace referencia a la propiedad que tienen los organismos para mantener una condición interna estable. (Lea: Enfermedades que pueden aparecer en épocas de invierno)
Las funciones del hígado se pueden dividir en: de síntesis y secreción, de transformación, excreción de desechos, inmunidad y remoción bacteriana, entre otras.
Bernardo Guerrero, médico veterinario epidemiólogo, afirmó que la presencia del parásito es frecuente en las lagunas y potreros de predios lecheros de Cundinamarca, Boyacá y Nariño.
“Una parte importante del ciclo de desarrollo de la fasciola se da en el caracol de la familia Limnaea. El semoviente puede consumir el agua o los pastos donde hace presencia el caracol y la larva se aloja en el estómago o el hígado”, señaló.
Es importante que los ganaderos siempre cuenten con la asesoría de un médico veterinario para poder realizar un diagnóstico y un tratamiento correcto a los animales. (Lea: Esta es la forma de cuidar la salud del hato en temporadas invernales)
A continuación les presentamos 5 recomendaciones para el manejo de esta patología en bovinos:
-Procure confirmar la presencia del parásito mediante examen de materia fecal en el laboratorio.
-Trate el lote de bovinos en el cual aparecen animales positivos.
-Utilice compuestos específicos contra el parásito (solo bajo formulación de un profesional en salud animal) como: Rafoxanede, Triclabendazol, Netobimin, Clorsulón, o Albendazol, este último al doble de la dosis recomendada.
-Controle los hospederos intermediarios, es decir, los caracoles, mediante el drenaje, cercado de zonas infestadas, pastoreo con patos y otras aves.
Para aquellos ganaderos ecológicos, que han reducido al máximo el uso de químicos, pueden implementar otra alternativa y es llevar patos al predio, que se encargan de consumir el caracol e impedir que la larva de la fasciola se desarrolle. (Lea: Efectos negativos del invierno sobre los parámetros productivos)
-Evite o reduzca la contaminación de potreros con huevos, tratando las materias fecales con procedimientos como compostaje o lombricultura.