El ensilado de maíz es la mejor manera que tienen los productores para enfrentar las épocas donde no hay abundancia de comida. Conozca los errores más comunes a la hora de prepararlo.
El proceso de ensilado de maíz es una de las prácticas que realizan los ganaderos para tener material forrajero suficiente que les ayude a mitigar los efectos del clima, especialmente en las temporadas de verano. Sin embargo, muchas son las personas que cometen simples equivocaciones que terminan por dañar todo el trabajo con el silo.
Julio César Arango, médico veterinario y zootecnista especialista en nutrición animal, indica que la importancia de este proceso de basa en que con el silo de maíz se tiene comida en épocas del año donde hay escases marcada de forraje. (Lea: Corrija errores a la hora de preparar silos en seminario en Yopal)
“Cuando producimos silo podemos darle mantenimiento a los animales y no caer en las ganancias de peso y producción de leche dependiendo de la finca en que se esté trabajando”, afirma Arango.
Basado en esto, conozca los errores para no caer en ellos:
Preparación del terreno
La escogencia del terreno es una de las partes más importantes del ensilado de maíz, pues muchas veces elige por facilidad y esto ocasiona que no se tenga una buena siembra.
“Muchas veces se ha visto terrenos que no son aptos para el cultivo y la gente simplemente por facilidad y cercanía seleccionan unas áreas que no son las indicadas como suelos demasiado húmedos y otros que no presentan un drenado como deberían tenerlo en el momento de la siembra”, señala Arango.
Escogencia de la semilla
La selección del material con el que se trabajará el terreno, hace parte de los errores que suelen cometer los productores, pues no lo hacen de forma adecuada dependiendo de las necesidades del suelo, sino que normalmente se elige el más “cómodo”.
“En algunas ocasiones por economía, el ganadero prefiere conseguir una semilla que no tiene las tecnologías como resistencia a gusanos, a manchas de asfaltos, que son un poco más exigentes pero que a la hora de finalizar el silo, son materiales que brindan mucha más cantidad con los mínimos gastos”, asegura Arango.
Análisis del suelo
Como en todo proceso de siembra, la persona debe tener en cuenta el suelo en el que se está realizando el proceso, por lo que es importante que el productor realice un análisis de ese terreno, para así determinar qué tipo de suplementos y materiales son aptos para garantizar el proceso del ensilaje.
Fermentación y elaboración del silo
“Cuando se va a hacer el silo se debe procurar que el corte ideal dependiendo de su finalidad con el material. Si es para alimentación de vacas y terneros, el tamaño que necesita es de mínimo 0.5 a 1cm”, expresa Arango.
Todo esto para que haya una compactación del forraje y así generar un efecto fisiológico en el rumen produciendo el efecto rumia.
Manejo de la humedad
El material forrajero producido en el ensilaje de maíz, debe ser en su mayoría seco, para así generar una buena calidad nutricional en el animal que lo consume. Pues en muchas ocasiones las personas lo mezclan con melaza, que a su vez es diluida con agua, lo que genera que aumente la fermentación y se dañe la calidad de la material
Los silos deben tener como mínimo un 45 % de matera seca para que se convierta en un producto de excelente calidad “por lo que recomiendo que se deben utilizar bacterias anaeróbicas fermentativas que nos ayuden en el proceso sin adicionar mucha agua”, concluye Arango.