Si las medidas establecidas por el Estado para el buen funcionamiento de estos lugares de sacrificio son incumplidas, las sanciones pueden ser drásticas, incluso contemplan el cierre del establecimiento. Conozca cuáles son y cómo efectuarlas.
En Colombia se está volviendo frecuente que las autoridades cierren plantas de beneficio animal. No importa la razón, normalmente se brinda la oportunidad a los encargados de la administración de tomar los correctivos que sean necesarios de cara a que luego de una visita de inspección se pueda autorizar su reapertura.
Sin embargo, en no pocas oportunidades la indiferencia prima y a la planta le desaparecen todos sus dolientes por lo que puede tardar semanas, e incluso meses, sin volver a abrir sus puertas. CONtexto ganadero les presenta las razones por las cuales pueden cerrar un establecimiento en Colombia
De acuerdo con la Resolución 240 del 31 de enero de 2013, del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, por medio de la cual se establecen los requisitos sanitarios para el funcionamiento de las plantas de beneficio animal de las especies bovina, bufalina y porcina, son 12 las razones para el cierre de uno de estos lugares. (Lea: Cierre de frigomatadero disparó sacrificio ilegal en Arauca)
“Las plantas de beneficio animal de categoría nacional, deben cumplir las condiciones de infraestructura y funcionamiento alrededor y dentro de la planta, teniendo en cuenta los estándares de ejecución sanitaria establecidos”, citó el documento.
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Localización y accesos
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Diseño y construcción
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Sistemas de drenaje
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Ventilación
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Iluminación
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Instalaciones sanitarias
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Control integrado de plagas
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Manejo de residuos líquidos y sólidos
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Calidad del agua
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Operaciones sanitarias
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Personal manipulador
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Instalaciones, equipos y utensilios
En la resolución, el Invima aseveró que si estas medidas son incumplidas por los establecimientos de beneficio animal en cualquier lugar del territorio nacional serán cerradas hasta cuando se cumpla a cabalidad con lo establecido por la ley.
“El Invima ejercerá las inspecciones, vigilancia y controles en los establecimientos. Cuando las normas sean modificadas, sustituidas o no se cumplan, se adoptarán medidas de seguridad y se impondrán las sanciones correspondientes”, culminó el documento. (Lea: En Boyacá no avanza organización de plantas de beneficio bovino)
Recomendaciones de un experto
De acuerdo con el subgerente de Cadenas Productivas de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán-FNG, Ignacio Amador Gómez, es importante que cada uno de los estándares de ejecución sanitaria establecidos se cumpla a cabalidad. El experto en el tema detalla algunos de los más importantes.
“Por ejemplo, la localización se debe regir de acuerdo al Plan de Ordenamiento Territorial, POT, el cual es definido por las Alcaldías y siempre indica que la planta debe estar construida en un área rural. Si el proyecto no responde a este POT, tendrá descalificación”, explicó Amador Gómez.
En cuanto a diseño, construcción, iluminación, ventilación, sistemas de drenaje, operaciones sanitarias e instalaciones sanitarias, toda planta de beneficio animal se debe regir con el decreto 1500 de 2007. (Lea: Denuncia: La comisión intersectorial se quedó en letra muerta)
“Sobre este decreto, la norma establece las medidas y el funcionario, o quien construye la planta, tendrá que adaptarse a esto. Además, debe prestarle atención a los filtros sanitarios, que son los encargados de evitar la contaminación cruzada, es decir, que un operario que esté en una zona sucia pase a una limpia sin ningún impedimento. Con este filtro, el operario tendrá que cambiar sus utensilios de trabajos para asegurar la inocuidad del producto”, aseveró el subgerente de Cadenas Productivas.
Frente al control integrado de plagas, Ignacio Amador Gómez fue enfático y manifestó que aunque en las zonas alrededor de las plantas de beneficio animal siempre habrá insectos y rodeores, es indispensable que el establecimiento lo contrarreste. (Lea: Sacrificio clandestino, un problema de nunca acabar)
“Las plantas deben tener un programa integrado para el control de plagas y rodeores para que estos no lleguen a las canales de carne”, aseguró Amador Gómez.
Aunque son varios los requerimientos que se exigen para el funcionamiento de una planta de beneficio animal, también es evidente que si las normas se cumplen a cabalidad, nunca se tendrá problema alguno con las entidades de seguridad.