Ante las fluctuaciones cíclicas de los volúmenes de oferta y precios de los mismos (MADR – Octubre 2012) se debe empezar a mejorar la capacidad de carga, que en la actualidad no supera una cabeza de ganado bovino por hectárea, e implementar la Planeación Forrajera (PF) para evitar las pérdidas de peso y consolidar los parámetros productivos y reproductivos.