Vecol sigue acompañando los grandes eventos de los ganaderos y por eso está presente en el 39 Congreso Nacional de Ganaderos que se realiza en Barranquilla, ofreciendo soluciones biotecnológicas acorde a sus necesidades. La actividad ganadera tiene muchos frentes de atención diaria pero uno de los más importantes y fundamentales es la sanidad porque allí radica el éxito de este negocio y así lo entiende Vecol que brinda alternativas efectivas frente al tema. En tal sentido, contar con un aliado que lo apoye para sacar adelante cualquier dificultad que se presente en este sentido es clave y es allí donde Vecol, como la empresa de los ganaderos, ha desempeñado un papel protagónico, aunque también lo hace en la parte agrícola. Según el presidente de Vecol, Juan Aurelio Moncada, el ganadero es una prioridad para la empresa, es nuestra misión brindarles soluciones integrales para la sanidad animal y la productividad en la ganadería. Como parte de la política de calidad de la compañía, Vecol da gran relevancia a la investigación, desarrollo, elaboración y comercialización de productos biotecnológicos, farmacéuticos que respondan a las necesidades y expectativas del sector, con un amplio portafolio respaldado por un gran talento humano comprometido e identificado con la razón de ser de la compañía. Plan sanitario
Entre las necesidades de los ganaderos está el generar un plan sanitario ya que ello “resulta esencial para el bienestar y el rendimiento óptimo de los animales. En consecuencia, el control de las enfermedades constituye una parte esencial de cualquier programa de gestión satisfactorio”, señaló César A. Jiménez, Médico veterinario zootecnista, especialista en sanidad animal, de Vecol. (Lea: Vecol hace un reconocimiento a los ganaderos en su día) Añadió que el control de las enfermedades forma parte de la producción de alimentos de alta calidad y de ahí la importancia de un buen plan sanitario en cualquier explotación, sin importar su tamaño. Un programa de salud en bovinos debe evitar o disminuir la presentación de nuevas enfermedades y/o infecciones, así como controlar y/o erradicar las enfermedades ya existentes o bajar su impacto. Esto se logra a través de medidas de bioseguridad, vacunación, tratamiento y manejo Explicó que un plan sanitario de una ganadería debería estar conformado por varias herramientas como un calendario o programador de actividades generales (vacunaciones, tratamientos, manejos preventivos y de control); protocolos de tratamientos de enfermedades más frecuentes y de primeros auxilios (fiebre de garrapata, diarreas, mastitis, cojeras, retenciones de placenta, entre otros). Así mismo, protocolos de manejo (cuidados por edad, rutina de ordeño, manejo de vacunaciones, protocolo de baños insecticidas, otros); medidas de bioseguridad (cuarentenas, desinfecciones, control de vectores, restricción de ingreso de animales y personas), y, un buen botiquín veterinario que incluya medicamentos para atención de reacciones adversas, alergias, intoxicaciones y urgencias; medicamentos para manejos sintomáticos generales; medicamentos de soporte y para prevención de patologías; medicamentos complementarios; y, equipos e insumos. Importancia de la inmunización
Otro aspecto clave en cualquier hato es inmunizar al ganado contra la Fiebre Aftosa y la Rabia Bovina porque así evita grandes pérdidas. Según indicó el médico veterinario zootecnista y líder regional de Vecol, Mauricio Estrada, la inmunidad es la resistencia natural o adquirida de un organismo vivo a un antígeno, ya sea un agente infeccioso (como los microbios) o tóxico (como venenos y sustancias tóxicas). (Lea: Vecol, a la vanguardia y modernización en procesos de manufactura en la industria farmacéutica) Para lograr la inmunidad se deben conocer los ciclos de las enfermedades, las fuentes de infección, los mecanismos de transmisión, y la población susceptible. Existen dos tipos de inmunidad, la activa y la pasiva. En el primer caso se sufre la enfermedad y se vacuna, mientras que en el segundo hay anticuerpos transferidos, no producidos por el animal, y se combaten con sueros y calostros. El calostro transfiere inmunoglobulinas que portan la memoria inmunológica de las madres al recién nacido y así enseña a su sistema defensivo que se defienda de las posibles infecciones y enfermedades al nacer “adiestra al sistema defensivo”. La fiebre aftosa es una enfermedad de las mucosas cuyo periodo de incubación es de 2 a 14 días. En las primeras 24 a 72 horas no se observa ningún síntoma; entre 72 y 96 horas ya se inicia la fiebre, aparecen vesículas en cavidad oral, patas, pezones, y rumen. Se presenta salivación, descarga nasal, claudicación (Cojera). 120 horas… ruptura de vesículas, úlceras e intensificación de los síntomas. Cuando virus llega al día 8 al 15 hay disminución de títulos del virus en varios tejidos y líquidos; cura de Lesiones, el animal comienza a comer; desaparición gradual del virus en tejidos y líquidos; aumento en la producción de anticuerpos, hay cura del animal pero el virus persiste en la faringe. Todos los signos son comunes a otras enfermedades vesiculares, lo que hace imposible el diagnóstico diferencial en el campo. (Lea: Planta de Aftosa de Vecol fue recertificada en bioseguridad) Otra enfermedad de cuidado es la rabia bovina, conocida también como hidrofobia, es una Encefalitis terminal zoonótica, producida por el virus rábico que afecta a los animales de sangre caliente, incluyendo al hombre. Según Estrada, el ciclo inicia cuando el bovino es mordido por un animal rabioso, el virus penetra por la saliva infectada y se disemina a través de los nervios al cordón espinal y al cerebro. Es incubado entre 3 y 12 semanas sin sintomatología. Cuando alcanza el cerebro, pasa a las glándulas salivales y comienzan los signos clínicos. El animal infectado muere dentro de los 7 días después de comenzados los signos. Enfermedades Reproductivas
Un animal está en buenas condiciones de bienestar si se encuentra sano, cómodo, bien alimentado, seguro, y que pueda expresar formas innatas de comportamiento, señaló Claudio Bohórquez, médico veterinario y patólogo veterinario, supervisor técnico de Animales de Producción en Vecol. Entre las enfermedades reproductivas en bovinos se destacan Brucelosis, Leptospirosis, IBR y DVB. La primera es una enfermedad zoonótica, intracelular que afecta a diferentes especies de animales domésticos y silvestres y se adquiere por contacto con secreciones infectadas producidas durante los abortos o por ingestión de productos cárnicos o lácticos contaminados. Debido a la localización intracelular de la Brucella, se requiere la asociación de varios antimicrobianos durante varias semanas para su tratamiento.(Lea: Las 5 enfermedades reproductivas que más afectan al ganado en Colombia) A su turno, la leptospirosis es una enfermedad febril aguda, que afecta a algunos animales y al ser humano, puede ser leve o mortal, especialmente cuando compromete el hígado, riñones o sistema nervioso. Penetra por piel y mucosas, se multiplica en sangre, parénquima hepático, invade órganos. La Leptospirosis crónica provoca abortos, retenciones placentarias o la muerte embrionaria; abortos a término o terneros que mueren en la primera semana de vida. A su vez la IBR Rinotraqueitis viral bovina es causada por un herpesvirus (BHV - 1) que causa también Vulvovaginitis pustular infecciosa. Se presenta como enfermedad fatal en terneros nonatos no protegidos, interesando una o más superficies de mucosas del tracto respiratorio y gastrointestinal. La enfermedad comienza con un estado gripal, con descargas nasales e inflamación de conjuntiva. En adultos se limita a la infección de las vías respiratorias, con complicaciones en los animales preñados. Estas afecciones respiratorias, hace a algunos susceptibles a Pasteurella Haemolytica, que causa severas neumonías. Este virus tiene la característica de mantenerse en el bovino en forma activa, es decir, sin causar enfermedad después de una infección inicial. Por problemas de estrés puede reactivarse y ser nuevamente excretado. De no producirse infecciones secundarias, la recuperación es rápida. La presencia de IBR en un hato predispone a los animales a la infección por otros virus y bacterias, especialmente de Moraxella bovis (causante de queratoconjuntivitis infecciosa), bacteria oportunista que aprovecha la enfermedad causada por IBR para instalarse en la conjuntiva. Vecol siempre seguirá trabajando para los ganaderos para generar productos biotecnológicos de la más alta calidad para suplir sus necesidades