Mientras muchos sectores siguen celebrando las aprobación de los Tratados de Libre Comercio con la Unión Europea y Estados Unidos, los ganaderos sienten que la aprobación del TLC con el país asiático favorecerá los intereses del sector.
Aún no entran en vigencia los Acuerdos Comerciales que firmó el país el año pasado y el sector agropecuario no para de sufrir con el ingreso de leche en polvo y arroz importado. Por ejemplo, en departamentos como Arauca, Huila, Caquetá, la producción se vino a pique por cuenta de este fenómeno, que destruye las finanzas de miles de agricultores que han dedicado toda su vida a trabajar en el campo. (Desde Casanare, arroceros piden protección para el sector agrícola)
Sin embargo, las noticias positivas llegaron para la ganadería colombiana, cuando esta semana se aprobó el Tratado de Libre Comercio con Corea del Sur. Debido al déficit que tiene el país asiático en la producción de carne, Colombia surge como el país que se encargue de surtir ese mercado.
Para 2019, la producción interna solo será capaz de abastecer el 48% de la demanda total, lo cual estima una necesidad de 349 mil toneladas para el 52% restante de la población. (Gobierno de Corea del Sur aprobó TLC con Colombia)
En el caso de la leche en polvo y el consumo de queso, el consumo aumentará un 30% y 10% respectivamente, pero la producción interna solo será capaz de abastecer el 39% de los consumidores de queso y 18% de leche, lo cual muestra la gran oportunidad que tiene el país en estos rubros.
Los resultados alcanzados en esta negociación, según informó la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, fueron un cupo de 9.900 toneladas de carne de bovino deshuesada y liberalización total del comercio en un plazo de 19 años. En lácteos se acordó un cupo sin arancel de 100 toneladas de leche en polvo; desgravaciones a 10, 15 y 16 años para crema de leche, lactosueros, quesos y arequipe, y desmonte inmediato de los aranceles para las bebidas lácteas (avenas).
No obstante, lograr estos beneficios para la ganadería colombiana no fue una tarea fácil. José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de Fedegán, fue persuasivo con el jefe negociador del Tratado, Javier Gamboa, porque inicialmente el tema ganadero estaba por fuera o eran considerados como un comodín.
Gracias a las múltiples misivas enviadas por el presidente ejecutivo de Fedegán a los negociadores, estos lograron persuadir a los coreanos quienes finalmente aceptaron e incluyeron el tema ganadero. (Al país le llegó la hora de tomar decisiones para salvar al sector lácteo)
Pero los detractores al TLC con Corea no se hicieron esperar y fue el senador Jorge Robledo, quien criticó al Gobierno por permitir que el acuerdo solo beneficie a la agricultura, mientras otros sectores como el de las autopartes, textiles y electrodomésticos, serán varios de los grandes perjudicados.
“Corea es el 4 exportador de textiles en el mundo, el 5 fabricante de vehículos y una potencia en la producción de electrodomésticos. Bajo estas condiciones, el TLC es un 'carrobomba' en la puerta de la industria nacional”, expresó el senador Robledo.
Los Tratados siempre dejan victoriosos y derrotados, los primeros en sufrir fueron los productores agropecuarios y ahora, ellos celebran, mientras otros gremios buscan alternativas para competir frente a grandes potencias.