Los ganaderos tradicionales, especialmente los pequeños, no están acostumbrados a las formalidades que exige la ley para otro tipo de negocios, como la creación de una empresa, llevar registros contables, expedir facturas o declarar renta.

Esto sin hablar de las exigencias sanitarias, que incluyen a toda la cadena para que el consumidor final reciba un producto totalmente inocuo, bien sea carne o leche. (Lea: Subastas también piden evitar especulación de precios del ganado)

En el campo económico, las reformas tributarias de 2012 y 2016 establecieron varios cambios al negocio ganadero. Ahora, los ganaderos ahora pueden hacer elegir entre hacer parte del régimen común o simplificado del IVA y, más aún, los primeros deben facturar electrónicamente.

En este sentido, las subastas juegan un papel importante para contribuir en la formalización del negocio, como lo señaló Camilo Romero, gerente de Subastar S.A. y presidente de la junta directiva de Asosubastas.

“Las subastas somos formalizadoras de transacciones comerciales, somos los intermediarios que enlazamos un proveedor con un comprador y prestamos ese servicio”, aseguró. (Lea en CONtexto ganadero: Lanzan ‘Subasta en su móvil’, formato de venta de ganado por Whatsapp)

Romero explicó que en un mundo cada vez más globalizado, el mercado viene exigiendo esta formalización. En ese sentido, señaló que las subastas constituyen el “principal aliado” para lograr ese propósito, pues pueden adquirir y vender animales con todos los documentos legales.

“Con las subastas, los productores hacen transacciones formalmente, comprando los ganados en subastas con su sanidad al día, con su guía de movilización, hacen una operación transparente. En eso han trabajado desde hace más de 20 años”, agregó.

Por ejemplo, las comercializadoras ya están adelantando la implementación de la factura electrónica, que será exigida a partir de 2019. Si los ganaderos no lo estaban haciendo por su cuenta, se interesan más por aplicar el sistema electrónico si ven el modelo de las subastas.

Para Paul Rodríguez, ganadero de Córdoba, las transacciones a través de las subastas no solo implican mayor legalidad, sino que también le transmiten confianza y seguridad, a diferencia de la comercialización directa. (Lea en CONtexto ganadero: Este sería el costo de aplicar factura electrónica en su ganadería)

“La subasta se hace responsable de pagar el ganado directamente cuando las personas lo llevan, lo que da mayor transparencia para los productores. Además, el Gobierno cada vez es más riguroso y nos exige más a los ganaderos en la forma como debemos llevar nuestra contabilidad, entonces las comercializadoras ayudan a legalizar más el negocio”, aportó.