Así como el precio del petróleo ha sufrido graves caídas en las últimas semanas, el valor internacional de la leche en polvo tanto entera como descremada, al igual que algunos derivados como la mantequilla y el queso (salvo en el mercado oceánico), también presentan la misma tendencia.
El informe semanal T.C. Jacoby & Co., una empresa familiar de productos lácteos más importantes de Norteamérica, inició con una declaración sombría: “La derrota continúa. Los mercados lácteos cayeron en una depresión aún más profunda esta semana”.
El documento, replicado en el portal Dairy Business de Estados Unidos, evidencia un panorama desalentador en el sector por la crisis que ocasionó el nuevo coronavirus. (Lea: ¿Cómo se ha visto afectada la industria láctea de cada país por el Covid-19?)
“Estamos en los días más oscuros de esta crisis. Los consumidores están confinados y la demanda se ha derrumbado. Los procesadores están acumulando productos”, aseguró el documento sobre la situación en la primera potencia del mundo.
Y agregó: “La leche está rebosando y es probable que la producción de primavera abrume al mercado por otros dos meses. La fuerza laboral de la industria del embalaje está enferma o refugiada por cuenta del virus, y los volúmenes de sacrificio de ganado se han desplomado”.
En efecto, aun cuando los lecheros traten de descartar bovinos enviándolos a matadero, no podrán hacerlo hasta que las empacadoras de carne brinden condiciones más seguras a sus empleados. (Lea: Propagación del coronavirus golpea el precio mundial de la leche)
Por su parte, las estadísticas del Consejo de Exportación de Lácteos de Estados Unidos (USDEC, por sus siglas en inglés) evidencian el declive en los precios de leche en polvo en los 3 mercados (EE. UU., Unión Europea y Oceanía) en los últimos 2 meses por la caída de la demanda.
Por ejemplo, en Estados Unidos la tonelada de leche en polvo entera alcanzó un máximo de USD 3994 en febrero, pero en abril ya cayó a USD 3737. Mientras tanto, en Oceanía, la tonelada de este producto pasó de USD 3165 al inicio de 2020, a USD 2756 en 4 meses.
La tonelada de leche en polvo descremada en Oceanía pasó de un máximo de USD 2998 a 2519, en tanto que la de EE. UU. perdió más de 600 dólares, llegando a USD 2132. (Lea: Excepcional incremento del precio del dólar se refleja en altos costos ganaderos)
En el caso del país norteamericano, la firma Jacoby reveló que las cooperativas ya están implementando programas para desacelerar la producción de leche, aunque como último recurso tendrán que botarla, como ocurre en Colombia. Sin embargo, sobre la situación actual, no dudan en afirmar que “el futuro no se ve tan sombrío como el presente”.
Si bien estas caídas pueden alentar a la industria colombiana a importar más leche en polvo, todavía es muy temprano para predecirlo, pues la economía nacional también ha estado muy golpeada y el dólar a $4000 puede disuadir a las grandes empresas, aun cuando esto no haya ocurrido antes. Por ahora, falta esperar cómo se comportará el volumen de importaciones en los próximos meses.