Ante la escasa atención que han recibido los ganaderos de Colombia durante la administración del Gobierno de Juan Manuel Santos, cada mes de marzo se ha convertido en uno de los pocos momentos en los que se hace algo relacionado con ellos y es determinar el porcentaje de aumento al valor que se les paga por litro de leche. Y ni así, porque en 2015 no se hizo ajuste alguno de la fórmula con la que se hace el cálculo para el pago, por lo que durante 2 años los productores tuvieron que asumir incrementos en todos los insumos que utilizan pero no así en el valor que reciben. Sobre el tema, José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, manifestó que “es necesario que el precio de la lecha tenga un aumento realmente significativo este año. Muchos ganaderos están trabajando a pérdida y se requiere que desde el Estado se haga algo por revertir la difícil situación que atraviesan”. Según el dirigente, el costo de los elementos necesarios para producir leche en el país es muy elevado y no se compadece con quienes están los campos de Colombia, especialmente con los medianos y pequeños productores que son la gran mayoría. (Lea: En menos de 40 días de 2017, Colombia está llena de leche importada) De igual manera, llamó la atención sobre el papel dominante que sigue jugando la industria del sector, la cual se rige por sus propias normas y a la que es necesario regular desde el Gobierno. “No es posible que las empresas sigan ajustando el precio de acuerdo a su conveniencia, mucho menos el que utilicen las bonificaciones para pagar a su antojo y mucho más grave, que sigan importando y llenando sus anaqueles para luego justificar enlechadas y con ello afectar al ganadero”, lamentó. Para Lafaurie Rivera, el aval tácito que el Gobierno le ha dado a las empresas que tienen monopolizado el mercado ha propiciado que no pocos hayan optado por abandonar el negocio y que otros tantos estén considerando alternativas productivas distintas. (Lea: Si quiere mejorar precio de la leche, apuéstele a la calidad y no a la cantidad) En su criterio, “el ajuste de la fórmula no debería verse como una obligación, flaco favor le hace eso a nuestro sector ganadero, sino como la oportunidad de por una vez en mucho tiempo voltear la mirada a la ruralidad y favorecer a esas familias que con tanto trabajo y esfuerzo se esmeran para que en nuestras mesas no nos falte nunca un vaso de leche”. Ratificó también que es necesario tener en cuenta factores más allá de la reforma tributaria, entre los que mencionó la devaluación de la moneda, la participación de tantos intermediarios, el mal estado en el que sigue la red vial terciaria del país y la ausencia de programas de capacitación. (Lea: Ganaderos piden aumento del precio de la leche ante reforma tributaria) El líder gremial advirtió que Fedegán seguirá vigilante, a pesar de que ello le moleste a muchos de los que tienen en sus manos la facultad de favorecer los intereses de los productores de leche.