William Sánchez Lezdema, experto en pastos y forrajes, estos dos cereales, dice que el maíz y el sorgo tienen granos, que cuentan con carbohidratos solubles y almidones que son fuente de energía. Ambos tienen un alto valor nutricional y son fundamental para la producción ganadera.

De acuerdo con el profesional “son plantas muy semejantes porque son gramíneas con raíces fibrosas. Por lo que quizás, algunas diferencias marcadas es que la planta de sorgo tiene una raíz un poco más profunda que el maíz, y de ahí su mayor resistencia a la sequía”.

En ese orden de ideas, ambas al final del cultivo, tienen un total de 11 a 13 hojas. En el caso del maíz, la hoja masculina y femenina están forma separada, y el sorgo tiene solo una panoja donde se encuentra tanto la flor masculina como la femenina. (Lea en CONtexto ganadero:Sorgo forrajero, una buena opción para el pastoreo )

“Lo más importante de estas dos plantas es la producción de granos, que es donde está su mayor aporte tanto de azucares como de almidón. Así mismo pasa con las hojas, por ser donde se concentra la mayor cantidad de proteína, y quizás lo menos valioso es el tallo, por lo que entre más mazorca o más panoja tenga una planta de estas, su valor nutritivo va a ser mucho mayor”, describe el profesional Sánchez Lezdema.

Similitudes

* Valor nutricional: Tanto el maíz como el sorgo forrajero son fuentes valiosas de energía y carbohidratos para los animales. Ambos son utilizados para satisfacer las necesidades energéticas del ganado. * Alimentación de rumiantes: Son cultivos adecuados para la alimentación de rumiantes debido a su contenido de fibra. * Versatilidad en la alimentación: Tanto el maíz como el sorgo pueden utilizarse en una variedad de formas en la alimentación animal como grano, silo, ensilaje o forraje verde. * Cosecha y almacenamiento: Ambos se cosechan y almacenan de forma similar, lo cual facilita su inclusión en las raciones de los animales.

Diferencias

* En cuanto a composición nutricional, el maíz es rico en almidón y tiene un alto contenido de energía, siendo una fuente importante de carbohidratos para el ganado. Por el lado del sorgo forrajero, esto contiene menos almidón que el maíz y tiende a tener un contenido de fibra más alto.

* Si se habla de adaptabilidad a condicionales ambientales, el maíz es más sensible al frío y al exceso de humedad, lo que limita su cultivo en ciertas regiones. Para el caso del sorgo forrajero, es más resistente al estrés por sequía y puede cultivarse en una variedad de condiciones climáticas.

* El maíz se utiliza comúnmente en la alimentación de animales, pero también es un cultivo importante para la producción de alimentos humanos y la industria biocombustible, mientras que el sorgo forrajero se cultiva principalmente con finales de alimentación animal, especialmente para el ganado y aves de corral. Este último también se utiliza ocasionalmente en la producción de etanol y como forraje verde o ensilaje. (Lea en CONtexto ganadero: Maíz, una alternativa para forraje )