Declarar situación de desastre nacional en la subregión de La Mojana solicitó el presidente ejecutivo de Fedegán, José Félix Lafaurie Rivera, al presidente de la República, Iván Duque Márquez, en una carta donde también le plantea soluciones de corto, mediano y largo plazo con el apoyo del gremio cúpula de la ganadería colombiana.
“Dada la inmensa tragedia que está sufriendo la región de La Mojana y sus repercusiones económicas y sociales, en medio de una pandemia que ya ha retrasado el desarrollo normal de la economía y aumentado el desempleo y la pobreza, consideramos que, para avanzar hacia una solución definitiva, se dan todas las condiciones, en los términos del artículo 56 de la Ley 1523 de 2012, para declarar, en la región de La Mojana, la situación de desastre nacional”, indicó el dirigente gremial en la misiva enviada al Primer Mandatario.
En el mencionado artículo se indica que para que se declare situación de desastre nacional debe existir “materialización del riesgo afecte de manera desfavorable y grave los bienes jurídicos protegidos de las personas, de la colectividad nacional y de las instituciones de la Administración Pública Nacional, en todo el territorio nacional o en parte considerable del mismo” (literal a).
También, “cuando se hayan producido efectos adversos en uno (1) o más departamentos y su impacto rebase la capacidad técnica y los recursos de las administraciones departamentales y municipales involucradas” (literal b).
Vale la pena recordar que la subregión de La Mojana abarca 11 municipios de cuatro departamentos: Sucre (San Marcos, Sucre, San Benito Abad, Majagual, Guaranda y Caimito), Bolívar (Magangué, Achí y San Jacinto del Cauca), Córdoba (Ayapel) y Antioquia (Nechí).
El literal c del artículo 56 expresa que existirá situación de calamidad nacional “cuando la emergencia tenga la capacidad de impactar de manera desfavorable y grave la economía nacional, las redes de servicios nacionales en su totalidad o en parte significativa de las mismas, el distrito capital y otros centros urbanos de importancia regional en la red de ciudades”.
Lafaurie Rivera manifestó que, dentro de ese contexto, y como bien enuncia el mencionado literal b del artículo 56 de la ley, el impacto rebasa la capacidad técnica y los recursos de las administraciones departamentales y municipales involucradas. En consecuencia, “se requieren acciones lideradas por el Gobierno Nacional a través de los ministerios, para atender las acciones urgentes, las de recuperación y aquellas para para la solución definitiva, entre las cuales solo me referiré, principalmente, a las relacionadas con la actividad ganadera”.
Acciones de corto plazo
El presidente ejecutivo de Fedegán sostuvo que en apenas dos meses, por cuenta del agotamiento de las pasturas en las zonas de destino de la trashumancia, empezará una emergencia alimentaria que demandará del suministro de suplementos, de alta y costosa complejidad logística.
“Nuestras estimaciones, para 350 000 animales y el subsidio del 50 % de la necesidad alimentaria durante seis meses, arrojan un volumen de: 204 000 toneladas de heno, 815 000 toneladas de silo, 5000 toneladas de melaza y 1000 toneladas de sal mineralizada”, añadió.
Lafaurie Rivera puso a disposición del gobierno la experiencia de Fedegán dado que, en 2010, durante la ola invernal de 2010, se trabajaron convenios con el Ministerio de Agricultura y con el apoyo de los gremios regionales, “logramos, adquirir, embodegar y distribuir 82.242 toneladas de suplementos alimenticios en todo el país”.
Agregó que “con base en las medidas sobre financiamiento contempladas en la ley, es urgente congelar los intereses y los pagos de los créditos con el sector financiero, de las personas que demuestren afectación en la región, pues la generación de ingreso se redujo a cero para muchos productores agropecuarios y, sencillamente, no tienen con qué pagar”.
Acciones de mediano plazo
El dirigente gremial afirmó que la recuperación de las tierras, que quedaran “lavadas” de nutrientes, y la creación de pasturas comenzando desde cero, no tomará menos de seis meses, a partir del momento en que la tierra pueda ser intervenida, para lo cual se requerirá:
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La puesta a disposición de agricultores y ganaderos, de los bancos de maquinaria de los municipios y departamentos, o el subsidio al pago de servicios de labranza mecanizada, o de mano de obra (jornales), para el caso de pequeños productores.
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La creación de una Línea Especial de Crédito (LEC) en Finagro, para la recuperación de tierras y praderas en La Mojana, en condiciones de amortización que consideren la temporalidad de dicha recuperación.
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El subsidio temporal a los insumos necesarios para la recuperación de las tierras y el establecimiento de praderas (abono orgánico, cal dolomita, semillas, abonos, etc.)
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Subsidio a la reconstrucción de viviendas e instalaciones dedicadas a la producción (establos, corrales jagüeyes, etc.
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La recuperación de la infraestructura básica, comenzando por las vías terciarias afectadas, canales de riego, acueductos veredales, etc.
En este proceso de recuperación, Fedegán nuevamente pone a disposición del Gobierno Nacional su capacidad de asistencia técnica en la región a través de los Centros de Servicios Tecnológicos Ganaderos (Tecnig@n) y de una herramienta que produjo muy buenos resultados en el apoyo a pequeños ganaderos durante la ola invernal de 2010, que llamó en su momento “Asistegán Ola Invernal”, dentro de un esquema de cofinanciación con los municipios, los departamentos, o bien, con el Gobierno Nacional a través del MADR.
Acciones de largo plazo
Entre las acciones de largo plazo que propone Lafaurie al presidente Duque están:
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El Ministerio del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, conjuntamente con las corporaciones autónomas regionales y las autoridades regionales y locales, deberán promover programas de reforestación y recuperación del paisaje, que quedará devastado cuando bajen las aguas. En este aspecto, que es fundamental para la preservación del valioso ecosistema de La Mojana, y tratándose de una región ganadera, la financiación masiva de sistemas silvopastoriles intensivos es una iniciativa que permitirá alcanzar dos objetivos a la vez: la recuperación de la naturaleza y la recuperación de la actividad ganadera, que es determinante en el desarrollo económico y social de la región.
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La recuperación de la red vial terciaria es de urgencia manifiesta, aun antes de la actual emergencia.
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Como sucedió hace diez años, la vacunación contra fiebre aftosa podría ser gratuita en la región durante 2022.
“Hay mucho más que hacer por La Mojana, señor presidente, además de no volver a aplazar la tantas veces aplazada solución definitiva. Entendemos las dificultades fiscales derivadas de la pandemia, pero también entendemos que el desastre en La Mojana, quizás no tan notorio en un país acostumbrado a las inundaciones, requiere con urgencia de la acción articulada del Estado bajo su liderazgo”, concluyó el presidente ejecutivo de Fedegán.
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