Así lo dejó entrever el presidente ejecutivo de Fedegán, José Félix Lafaurie Rivera, como la gran síntesis de la gira Comercial que realizó el sector privado y gobierno a este continente y que trajo como gran presea la admisibilidad sanitaria a la carne colombiana.

“Ahí tenemos todo un mundo por delante”, al referirse a magnitud de ese mercado. “Solo Indonesia tiene 275 millones de consumidores, Japón 126, Filipinas 112, Tailandia 70, Corea 52 y Malasia 33, y todo el bloque se asoma a los 1.000 millones de habitantes”.

Y no hacía referencia sólo a los mil millones de habitantes de ese bloque económico, sino a una característica que importa mucho a la hora de hacer negocios: que son países de alto y medio nivel de ingresos, y “sobre todo… con pocos animales en relación con su población”.

En otras palabras: tienen plata, pero no suficiente proteína animal bovina. …y ya nos abrieron la puerta. Esa oportunidad es única, pues es, además, puerta de entrada a lo que hoy se conoce como Asia – Pacífico. Eso lo deben entender todos los ganaderos, y desde luego el gobierno.

Eso lo lleva a una reflexión, tal vez más importante no sólo para el sector sino para toda la economía colombiana: “debemos abandonar la visión de corto horizonte de pensar que (Estados Unidos) es la panacea, pues a pesar de ser nuestro principal aliado comercial y de tener un TLC firmado, se resiste a reconocer nuestro estatus sanitario y a otorgar admisibilidad a la carne colombiana.

Suena como reclamo, pero plantea que no se trata de «patear la lonchera». Aconseja no abandonar la gestión con Estados Unidos para llegar con nuestra carne a ese país. Hay que seguir haciendo la tarea.

Advierte que no podemos caer en la tentación de poner todos los huevos en la canasta del mercado chino. Basta recordar la experiencia con Venezuela.

Lafaurie destaca, finalmente, «la importancia de entrar a ese club de vendedores de carne al mercado chino». Claro, una cosa es producir y otra cosa es vender. Y ese es un mercado de grandes ligas.

Esas lecciones que señaló Lafaurie en su última columna (Lea en CONtexto ganadero: China… y un mundo por delante), nos deja dos aspectos de reflexión: Una, la gran tarea de pensar los planes estratégicos, principalmente el del sector ganadero, y dos, concomitantemente, precisar la acción del gobierno para hacer realidad esa gran oportunidad, que pasa además por una acción bien coordinada entre sus instituciones.