De acuerdo con el DANE, la actividad económica Agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca tuvo una variación del 10,7 % al ser comparada con el tercer trimestre de 2023 y del 8,9 % en lo corrido de este año.
Las cifras específicas de sacrificio bovino expresan un crecimiento de 9,8 % al ser comparadas con el 3er trimestre de 2023.
Los indicadores de producción de leche también fueron positivos: un repunte del 8 % en el periodo julio-septiembre de 2024 en comparación con igual lapso del año pasado.
Estos resultados hacen parte del trabajo de las más de 600.000 familias ganaderas productoras de carne y leche 100 % natural en más de 1000 municipios colombianos.
Efectos del aumento de sacrificio en el tercer trimestre del año
De acuerdo con Óscar Cubillos, Director de estudios económicos y de Planeación de Fedegán-FNG, el aumento del sacrificio en el último trimestre responde a una menor inflación -el precio de la carne al consumidor este año ha subido solo 0.2%-, lo que hace que la gente tenga más posibilidad de consumir carne de res; y también a que la exportación se ha dinamizado, favoreciendo el sacrificio bovino.
Agregó que que es importante que variables como la tasa de cambio y la tasa de interés, que mostraron un importante cambio -la primera aumentó y la segunda bajó-, así como un precio internacional de la carne con tendencia al alza, se sostengan para que se siga manteniendo la cadena de valor al interior y que el precio de la carne se mantenga ´a raya'.
Producción de leche también creció
Según las cifras de el DANE, la producción de leche sin elaborar en el tercer trimestre de este año aumentó 8.0 %.
De acuerdo con el economista de Fedegán-FNG, si bien la producción de leche bajó, el precio pagado a los productores no ha recuperado su dinámica, pero el precio al consumidor se ha estabilizado, haciendo que el consumo se haya recuperado un poco.
Lo anterior deja una reflexión para la industria y los comercializadores, señala Cubillos: "Fijense que el tema (de la crisis lechera) sí está en el precio al consumidor, y que en la medida en que se estabilice ese precio o baje, el consumo empieza a reactivarse y, con una inflación ya controlada, haría que ese consumo empiece a darle de nuevo dinamismo al precio al productor".
Concluye señalando que en año y medio de crisis lechera, el ganadero -el productor- puso el mayor esfuerzo con un precio caído en más de 17%. Ya sabiendo que con un precio estable al consumidor, el consumo puede repuntar, vale la pena que la industria y los comercializadores reflexionen sobre mayores estrategias de mercadeo de publicidad, y sobre todo de precio, para que la gente pueda consumir más, sobre todo en en estas épocas navideñas".