Ante los buenos precios del ganado en lo corrido del año, la actividad de ceba está tomando un auge importante porque se muestra como un negocio ganadero exitoso.

Según Antonio del Dago, de Hacienda La Verónica, en estos momentos la demanda de carne y de ganado es muy alta, tanto a nivel nacional como internacional, y la producción no llega a los niveles que se necesitan.

Cada vez más productores están aprovechando sus fincas para cebar animales por la relativa facilidad con que se puede desarrollar esta actividad y porque los costos de producción no son tan altos como los de la lechería.

“Aunque es una actividad que no recoge a diario ganancias como lo pueden hacer las lecherías, es una actividad que se puede desarrollar sin tener que invertir mucho dinero en el día a día”, indicó. (Lea: Consejos para quien se inicia en la ceba de ganado)

Por eso, agregó, sumando esto a la alta demanda que tiene la carne y el ganado en pie, su precio ha venido aumentando a lo largo del año.

Si se quiere hacer una ceba que sea rentable, económica y deje altos beneficios, lo ideal es utilizar un forraje de calidad como base de la alimentación, independiente si es en pastoreo o en establo. Adicionalmente se debe suministrar una buena cantidad para que los animales ganan rápidamente peso.

Señaló que una ceba manejada de forma sencilla debe hacerse a pastoreo aunque no se puede descartar la semi estabulación o la estabulación ya que ello también va a dejar ganancias.

Aunque con el solo forraje puede ser suficiente también se debe tener en cuenta la suplementación con base en las necesidades del animal y las deficiencias de los pastos. Un ejemplo de ello es el silo de maíz, producto que se puede cultivar en la misma finca.

Además, con la suplementación se logra en menos tiempo tener animales que alcancen mayor cantidad de kilos y así recuperar más rápido la inversión. (Lea: Condiciones para el montaje de un proyecto de ceba de ganado de carne)

La única suplementación obligatoria en el manejo de los animales en el levante, la cría o la ceba es la que se hace con sales mineralizadas porque los minerales no los toman en la cantidad que necesitan con las pasturas que suelen tener deficiencias de algunos de ellos.

Esta sal se debe suministrar en la cantidad adecuada y de acuerdo con la actividad que los animales desarrollan y esto se debe hacer luego de analizar la calidad del forraje que se tiene para alimentar el ganado. Por lo general esa cantidad oscila entre 80 y 200 gramos al día.

“No todas las sales son adecuadas para todo tipo de ganado y siempre la comida determinará qué minerales requieren nuestros animales para conseguir que sean mucho más eficientes”.

Sumado a la sal lo que también es indispensable dar al ganado es agua a voluntad pero que también sea limpia y de calidad y a una temperatura adecuada para que los animales la puedan consumir cada vez que lo necesiten.

Así mismo es importante tener en cuenta la raza de ganado que se va a manejar y el mercado al cual se espera llegar para conseguir un mejor precio y facilidad en la comercialización. (Lea: Volvió a repuntar el precio del ganado en Santander)

“Quienes hoy día se están cambiando de lechería a ceba, esta es la alternativa para lograr producir mayor rentabilidad en nuestras ganaderías. Si queremos tener una ceba eficiente busquemos una raza que tenga un plus al pago y que produzca más kilos en el menor tiempo posible”, concluyó.