De acuerdo a un estudio realizado por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), la carne vacuna tiene más fanáticos que la gaseosa más popular del mundo. Le gana en personalidad a las dos principales carnes alternativas (pollo y cerdo). La amistad, la pasión, la seguridad y el liderazgo son los atributos que sobresalen. Una encuesta realizada por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) en Córdoba (octubre de 2017) demostró que la carne –siendo que se trata de un genérico– se impone por sobre marcas reconocidas, como la gaseosa mencionada, La Serenísima, Marolio o Taragüí. Argentina lidera el ranking de consumo de gaseosas en todo el mundo con un promedio anual de 131 litros por persona, según Euromonitor Internacional La muestra estuvo integrada por 200 encuestas, aplicada a un público objetivo preponderantemente masculino (70% hombres y 30% mujeres), con una segmentación conformada en un 54% por edades comprendidas entre 18 a 30 años, en un 38% por edades entre 31 y 60 años, y en un 8% 61 años o más. Concretamente una de las preguntas efectuadas fue “¿Qué puntaje le otorgaría Usted a las siguientes marcas y/o productos en función de su grado de fanatismo al producto?” La carne vacuna fue entonces sometida a la comparación con las siguientes marcas: Coca Cola, Fernet, La Serenisima, Marolio y Taragüi. Entre los hallazgos llama poderosamente la atención que mientras un 54% de la gente se considera “fanática” de la carne vacuna, un bajo porcentaje se considera de ese modo cuando se les pregunta por las demás marcas analizadas: Fernet (19%), Taragüi (9 %), La Serenísima (9 %), Coca Cola (9 %) y Marolio (3 %). “Esto demuestra el enorme potencial de la carne vacuna argentina que sin ser una marca está desde siempre en la mesa y el corazón de todos los argentinos”, sostuvo Ulises Forte, Presiente del IPCVA. “Cambian las épocas, cambian las formas de consumo, pero como tenemos medido en el Instituto, el 95% de los argentinos eligen nuestra carne, incluso los más jóvenes, que representan un desafío para la industria pero siguen valorando nuestra carne como lo hacemos nosotros y lo hacían nuestros abuelos”, agregó. En ese contexto, el fervor por el asado y las milanesas quedó ratificado en la muestra (48% y 41% de fanatismo respectivamente) superando claramente a cortes menos difundidos y a las carnes alternativas como el pollo (3%) o el cerdo (4%). Amistad, pasión y liderazgo Esta encuesta, sumada a otros estudios del IPCVA, demuestran que la carne vacuna tiene una potencia enorme a la hora de ver cómo se evalúan sus atributos o los valores que transmite el producto. Así lo indican los resultados de un estudio de mercado realizado por el IPCVA a través de Internet durante el segundo semestre del año pasado, basado en una muestra representativa de 1000 casos mensuales en todo el país. De la misma manera, cuando la comparación se hace frente a marcas de alimentos y bebidas, la carne le gana a la Coca-cola en la valoración de atributos de personalidad. Asimismo, la transmisión de valores como “optimismo” y “amistad” son puntos fuertes de la carne vacuna que la posicionan de igual a igual ante marcas comerciales de alimentos muy arraigadas en la Argentina como La Serenísima o Taragüí y le permiten superar a la gaseosa más conocida del mundo. Es sabido que la carne vacuna argentina posee valores tangibles que la posicionan entre las mejores del mundo (como el sabor y la terneza), pero estos nuevos datos dejan en claro que otros aspectos intangibles, como la amistad, la seguridad, la pasión y el liderazgo, le confieren al menos en el mercado interno una reputación que genera fanatismo aún entre los más jóvenes. Fuente: Carne Argentina. Esta publicación es desarrollada mensualmente por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA).