Empresarios del Cauca y el Valle del Cauca piden resultados de las más de 630 denuncias que se han interpuesto por amenazas, invasiones y agresiones en la región. A la fecha tan solo hay dos capturados en las más de seis mil hectáreas afectadas
Diferentes gremios de la producción del Valle, el Cauca y del orden nacional han señalado su preocupación por la invasión de tierras por parte de indígenas en el departamento del Cauca.
El hecho más reciente se registró el lunes de esta semana cuando, una vez más, los indígenas se tomaron tierras sembradas en caña y amenazaron a los trabajadores y quemaron algunos cultivos.
Durante el fin de semana se presentaron ocupaciones de predios de cultivadores de caña por parte de indígenas y encapuchados que amedrantan a la gente que vive de esta labor y se registraron disturbios entre estos invasores y las personas que muy temprano llegaron a cumplir con su trabajo diario.
Ante esta situación, la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), manifestó que el Gobierno Nacional debe garantizar el derecho al trabajo y la seguridad jurídica de la propiedad privada. Las autoridades judiciales deben actuar con efectividad. “Desde @SAColombia rechazamos las invasiones a los predios donde se realizan actividades agropecuarias”.
Por su parte el Consejo Gremial Nacional, del que hacen parte 31 gremios del país, alertó sobre la difícil situación que se presenta en el norte del Cauca por la intensificación de las agresiones a los trabajadores de la caña y las continuas invasiones a la propiedad privada. (Lea: Indígenas ya empezaron a invadir tierras, azucareros las primeras víctimas)
Recuerda que en los últimos diez días se han registrado afectaciones a nueve predios durante los cuales los trabajadores del sector han sido agredidos y amenazados y este primero de agosto fueron intimidados con artefactos explosivos.
Hicieron un llamado al Gobierno Nacional y a la Fiscalía para que garanticen la vida de las personas y el derecho al trabajo, la productividad y la propiedad privada.
“Es urgente que estas agresiones y ataques contra los habitantes y el progreso en el Cauca no queden en la impunidad y que la justicia resuelva las más de 630 denuncias que se han interpuesto por amenazas, invasiones y agresiones en la región”.
Igualmente el Consejo Gremial hizo un llamado a todos los colombianos para que se solidaricen con los trabajadores y empresarios del suroccidente del país y que rechacen los continuos actos de violencia protagonizados por encapuchados que no tienen respeto alguno por los derechos a la vida, al trabajo, la libre empresa y la propiedad privada.
Así mismo, en un comunicado conjunto Asocaña, Procaña, la Sociedad de Agricultores y Ganaderos del Valle, la Sociedad de Agricultores y Ganaderos del Cauca, el Comité Intergremial Empresarial del Valle del Cauca y el Consejo Gremial y Empresarial del Cauca, rechazaron “las continuas amenazas a trabajadores y daños contra la propiedad privada que se presentan en el norte del Cauca y que en los últimos dos meses han aumentado de forma exponencial”. (Lea: Líder de la minga indígena que generó paros y bloqueos dirigirá Unidad de Restitución de Tierras)
Sostienen que las acciones de los invasores demuestran que cada vez hay menos garantías para la vida, el trabajo, la productividad y el desarrollo de la región. Tan solo en el 2022 se ha afectado la productividad de cerca de mil hectáreas.
“Desde el sector empresarial del Cauca y el Valle del Cauca reiteramos el llamado urgente e insistente que desde hace varios meses hemos hecho a las autoridades judiciales, para que se entreguen resultados en las más de 630 denuncias que se han interpuesto por amenazas, invasiones y agresiones en la región. A la fecha tan solo hay dos capturados en las más de seis mil hectáreas afectadas”, señala el comunicado de los gremios.
Recuerdan que la agroindustria de la caña representa un eslabón muy importante en el desarrollo económico de estos municipios, con más de 50 mil empleos directos e indirectos en el norte del Cauca, por lo que “exigimos las garantías necesarias para seguir trabajando por el progreso del departamento”.
Por su parte, los trabajadores de caña hicieron un llamado a las autoridades para que tome cartas en el asunto pues no quieren quedarse sin trabajo por parte de estas personas que se toman predios ajenos.
A su vez, la directora de Procaña, Marta Betancourt, en declaraciones a Caracol radio señaló que no solo los miembros de ingenios están siendo afectados por la invasión, sino que los productores independientes de la zona también se han visto implicados. (Lea: La restitución de tierras necesita ajustes)
"En el valle geográfico del río Cauca, en cinco departamentos, hay 241 mil hectáreas sembradas de caña, las cuales el 75 % pertenecen a productores independientes que han tenido que sufrir ataques inclementes", expresó la directiva.
Así mismo, según cifras de Asocaña, solo en 2022 se han registrado 21 predios invadidos en Guachené, Padilla, Corinto, Miranda y Caloto, para un total de 800 hectáreas irrumpidas violentamente en lo que va corrido de este año.
"Una vez más observamos que los indígenas destruyen los cultivos de caña, poniendo en riesgo la estabilidad laboral de cientos de trabajadores. Esas invasiones niegan a ese pueblo la educación, la salud, pero también afecta un derecho fundamental que es el derecho al trabajo, ese derecho al trabajo que dignifica la vida de todos", dijo uno de los afectados a Noticias RCN.
Aunque el presidente electo, Gustavo Petro ha anunciado que allí se producirá el primer diálogo regional y que los empresarios de la caña están dispuestos a hablar, el gran temor es que el próximo director de la Unidad de Restitución de Tierras, Giovani Yule, es uno de los líderes indígenas que ha incentivado y participado en estas invasiones por lo que difícilmente va a ser imparcial y objetivo.