Este lunes se conocieron dos cifras desalentadoras para el sector lácteo colombiano: la primera fue la importación de más de 70 900 toneladas de diferentes derivados en el penúltimo mes de 2020, y la segunda es el consumo del 100 % del cupo arancelario de leche en polvo de Estados Unidos.

El informe Oficina de Planeación e Investigaciones Económicas de Fedegán-FNG, con base en los datos del DANE, revelaron que hasta el 30 de noviembre de 2020 ingresaron al país 70 909 toneladas de lácteos, entre leche en polvo y demás productos.

Estas importaciones tuvieron un costo total cercano a los USD 196 395 000 (valor CIF), con un costo promedio por tonelada de 2770 dólares. (Lea: Fedegán solicita la imposición de una medida de salvaguardia bilateral para la leche en polvo)

El dólar estuvo en promedio en $3685 en 2020, lo que quiere decir que la industria nacional destinó cerca de $724 000 millones o $10 207 000 por cada t. Como iban, es probable que las cifras de diciembre revelen un gasto superior a los USD 200 millones.  

Comparado con el mismo periodo de 2019, el número de toneladas aumentó 23 % frente las 57 724 t, en tanto que fue 35 % mayor a los USD 145 714 000. En ese año, el costo promedio por tonelada culminó en USD 2544, 226 dólares menos que en 2020.

El producto más importado fue la leche en polvo descremada, con 32 154 t por un valor de USD 82 572 000 (42 %), seguido por la entera, con 21 127 t por USD 69 993 000 (36 %). (Lea: Importaciones de lácteos se acercaron a las 70 000 toneladas en octubre)

Del costo total, el 55 % corresponde a compras de productos de Estados Unidos, como 26 031 t de leche en polvo descremada por USD 66 026 000, 4364 t de entera por USD 14 763 000, o 5409 t de lactosueros por USD 4 506 000, así como quesos y otros.

Justamente, la segunda mala noticia tiene que ver con el último reporte del contingente arancelario de leche en polvo proveniente de ese país, que revela que el cupo está prácticamente agotado antes de culminar el primer mes de 2021.

Hasta el lunes 25 de enero, se habían adquirido 12 968,95 t de las 12 969 del cupo completo, lo que corresponde al 100%, con solo 49,55 kg disponibles. (Lea: Solo falta por importar el 10 % del contingente arancelario de leche en polvo de EE. UU.)

Si bien este año se demoró más en acabar el cupo con respecto al 2020, cuando las 11 790 t se consumieron en 14 días, en el fondo la diferencia es insignificante, pues es claro que la industria está tratando de comprar la mayor cantidad de producto sin arancel y que seguirá consumiendo este cupo en los primeros días de cada año hasta que finalmente no haya contingentes, lo que sucederá en el 2026.