El mercado de la leche en Colombia sigue siendo complejo, con precios a la baja para el productor, pero al alza al consumidor y una menor demanda de productos lácteos.
Esto ha llevado a que se planteen diversas alternativas para tratar de lograr una solución que favorezca a toda la cadena, desde el productor hasta el consumidor.
Según el presidente de Analac, Felipe Pinilla, la industria ha reportado inventarios altos que están congestionando el mercado. Para ello, a través del Fondo de Estabilización de Precios de la carne y de la leche, la Secretaría Técnica puso en marcha un programa en donde a los industriales que deseen exportar esos excedentes se les da un incentivo que va entre $1,8 millones y $3,6 millones por tonelada.
Ahí se tienen mercados como el de Venezuela, el Caribe y Centroamérica, entre otros, que habitualmente han sido receptores de estas exportaciones. Eso se encuentra activo hasta finales de agosto de este año.
Señaló que Colombia tiene 18 mercados abiertos a los que regularmente se están yendo lácteos colombianos, que puede ser poco frente a lo que se importa, pero hay una dinámica que se está llevando a cabo. Hay cerca de 70 exportadores que están aprovechando una muy buena oportunidad que se tiene, pero allí también se tiene un trabajo por hacer para incrementar esas ventas. (Lea en CONtexto ganadero: Crisis en el sector lechero acelera desaparición de productores)
Así mismo, planteó que, frente al anunciado fenómeno de La Niña, hay una conversación que se está dando y frente a la cual se tienen buenas expectativas para colocar la leche que se produzca.
La idea es que algo similar a lo que se está haciendo para las exportaciones se pueda hacer con la leche nacional, es decir, que quien compre leche colombiana como insumo para elaboración de alimentos, como galletas o confitería, por ejemplo, reciba incentivos.
El formato y la metodología ya están, la entidad para ello existe y es la Bolsa Mercantil, los programas de compras públicas también se encuentran reglamentados por lo que el merado está. “Nos falta es que como sector podamos articularlo y que ese programa sea una herramienta para enfrentar esa temporada retadora”, manifestó el dirigente gremial.
Plan de ordenamiento
De otra parte, indicó que, frente a los anuncios del Ministerio de Agricultura, lo primero es que hay que abordarlos con optimismo y “como sector estamos totalmente dispuestos a trabajar juntos, pero también hay que ir a la realidad y ver de esos anuncios cuántos en el pasado reciente se han materializado”.
Reconoció que es un tema complejo que requiere de un trabajo de largo plazo, pero la invitación es a mirar una política pública que ya existe y que se llama el plan de ordenamiento productivo. (Lea en CONtexto ganadero: Gobierno anuncia medidas de apoyo al sector lechero, pero le falta el cómo)
“Ya tenemos reuniones, ideas, proyectos de largo plazo que han venido avanzando y que están ahí y lo que nos falta es ser hábiles en el sector, tanto productores como industria y el Ministerio, para aterrizar eso. Las normas están y hay que llevarlo a la práctica” aseguró.
Recordó que el consumo de lácteos ha cedido debido a un aumento de precios, sin embargo, como país, con este verano se tiene una producción de leche que, en volúmenes, está dentro del rango normal.
Esto a pesar que el verano hace más costoso producir y que la producción se caiga, en esta oportunidad los niveles han sido relativamente normales y no hay ninguna sobreproducción.
Por eso lo que también se debe es hacer una campaña más fuerte frente al consumo de lácteos porque eso es lo que va a permitir atacar de manera positivo esa demanda que ha retrocedido y ahí poder tener una recuperación de toda la cadena en general.
“Los colombianos somos muy cercanos al consumo de lácteos, nos gustan y tratamos de tenerlos dentro de nuestra canasta familiar”. Sin embargo, se han encarecido y eso lleva a que los hogares se tengan que apretar el cinturón. (Lea en CONtexto ganadero: Precio promedio de leche a nivel nacional vuelve a caer en el arranque del 2024)
“El productor lleva más de un año haciendo un esfuerzo en donde le han pagado un precio menor y le han recogido menos leche y por eso la invitación es a que ese esfuerzo se vea a la salida de las plantas procesadoras, en los supermercados, en las tiendas de descuento, y en general, en el mercado” dijo Pinilla.
Concluyó señalando que “hay campo para que ese sacrificio que hizo el productor, lo hagan otros eslabones de la cadena y que con eso repotenciemos el consumo que es algo que les interesa a todos en la cadena”.