La relación entre la cartera comercial y el PIB es estrecha: la cartera comercial refleja el volumen de crédito otorgado a empresas para financiar sus operaciones, inversiones y crecimiento. Un aumento en la cartera comercial suele indicar una mayor disponibilidad de financiamiento para el sector productivo, lo que puede impulsar la actividad económica y contribuir al crecimiento del PIB.
A su vez, cuando el PIB crece, las empresas tienden a aumentar la demanda de crédito para expandir sus negocios, generando un ciclo de retroalimentación positiva entre ambos indicadores. Sin embargo, un exceso de crédito sin un crecimiento económico real puede generar riesgos financieros, señala un informe de Bancolombia.
El reporte titulado “Comportamiento del crédito: Enfoque Sectorial”, hace un análisis del comportamiento del crédito en diferentes ramas de la producción. Según las más recientes cifras del Dane, agricultura, ganadería, caza y pesca, fue la actividad que más creció en el tercer trimestre, logrando un repunte de 10,7 % y consolidando sus aportes a la economía nacional.
De acuerdo con Bancolombia parte del avance del sector se apoya en una recuperación de la cosecha cafetera. No obstante, la mayor cuota la aporta el resto de los cultivos: flores, leguminosas, frutas y cacao, así como la producción porcícola. De otro lado, se destaca una reducción en costos de fertilizantes (menores precios internacionales y una tasa de cambio favorable), y unas exportaciones que crecen notablemente (fuertes aumentos en flores y frutas). En adelante, persisten riesgos por la variabilidad climática y lo que los conflictos geopolíticos puedan significar para el comercio internacional. (Lea en CONtexto ganadero: EcoGanadería, nueva línea de crédito del Banco Agrario para promover la ganadería sostenible)
Las actividades pecuarias y agroexportadoras son las más relevantes en la financiación del sector, con un 41 % y 31 % del saldo de capital, al cierre del primer semestre. Se resalta dentro de estas actividades, las cuales son inversiones de largo plazo, el crecimiento del saldo a capital, entre 2018 y 2024, de la floricultura (+243 %), las frutas tropicales (+140 %) y la porcicultura (+80,5 %).
Al analizar el comportamiento del nivel de riesgo en la cartera, los cultivos de palma de aceite y caña de azúcar, asociados a la cadena agroindustrial, continúan superando la cartera agregada del sector que se ubicaba en 12,3 %, seguidos de la actividad avícola.
Resalta la entidad el aumento de la cartera de frutas tropicales, que pasó a 13,6 % en el segundo trimestre del presente año frente a 4,5 % en el mismo periodo de 2023. Por su parte, en el caso del ganado bovino fue de 7,6 % en 2023 y ahora llegó a 30,8 %.
Igualmente, destaca que tres de los principales bancos han ganado participación en el sector agropecuario en los últimos cinco años. BBVA (4,6 pp), Davivienda (3,3 pp) y Banco de Occidente (3 pp), mientras Bancolombia permanece estable y Banco de Bogotá (-0,8 pp) retrocede. Davivienda es el único banco, dentro de los cinco principales, que posee mayor nivel de riesgo en los créditos del sector agropecuario, ya que posee una cartera en B+ de 16 %, superior al 12,3 % del sector. (Lea en CONtexto ganadero: Nueva línea de crédito de Finagro para un agro más sostenible)
El riesgo de cartera se modera y el saldo a capital crece a mayor ritmo en los últimos años. El PIB del sector, al igual que su financiación, continúa creciendo y la cartera en B+ disminuye. “En adelante, esperaríamos que la mayor diversificación en la oferta agroexportadora del país y una continua mejora en la cartera en B+ sean los principales movilizadores en el crecimiento crediticio del sector”, señala Bancolombia.
Pacto por el crédito
De otro lado, en días pasados se presentó un balance del pacto por el crédito que fue el acuerdo suscrito por el gobierno con la banca para no llevar al congreso un proyecto de ley de inversiones forzosas para estas entidades.
El 27 de agosto pasado se firmó dicho acuerdo que estableció la asignación de un mayor crédito a las actividades productivas de la economía. Los recursos del crédito están enfocados principalmente en: vivienda, agroindustria, economía popular, transición energética y turismo. Todas estas áreas son claves para la reactivación económica.
El crédito acordado fue la ampliación por $55 billones para los próximos 18 meses. El ministro de hacienda, Ricardo Bonilla, informó que la meta es llegar a los $249 billones en los 18 meses, tomando como referencia los $194 billones que ya se habían otorgado antes de este acuerdo. Eso quiere decir que los 55 billones de pesos son un esfuerzo adicional para el crecimiento del país. (Lea en CONtexto ganadero: Bancolombia lanza nueva línea de crédito para ganadería sostenible)
La Superintendencia Financiera informó que entre el 28 de septiembre y el 1 de noviembre de 2024, el sistema financiero desembolsó $13,4 billones en el marco del Pacto por el Crédito, lo que representa un incremento de 25,8 % en comparación con el mismo periodo del año anterior.
En cuanto a la distribución sectorial, el sector de manufacturas y transformación energética recibió $8 billones, registrando un aumento de 28,2 % respecto al año anterior. El sector de vivienda e infraestructura alcanzó $3,1 billones, con un crecimiento de 29,7 %, mientras que el sector agropecuario sumó $1,7 billones, mostrando un incremento de 11,7 %. El sector turismo recibió $0,4 billones, lo que equivale a un crecimiento de 21,5 %, mientras que la economía popular registró desembolsos por $30.000 millones, con una disminución de 9,7 %.
En un periodo más amplio, comprendido entre el 6 de septiembre y el 1 de noviembre de 2024, los desembolsos asociados al Pacto por el Crédito totalizaron $23,95 billones, lo que representa un cumplimiento de 9,6 % frente al total proyectado de $248,6 billones.
La tasa de interés promedio ponderado aplicada a los desembolsos en los sectores priorizados dentro del Pacto por el Crédito fue de 15,7%.
Por área geográfica, 69 % de los desembolsos se realizaron en tres de ellas: Bogotá (30 %), Antioquia (22 %) y Valle (16 %). En el caso de la economía popular, el principal departamento es Nariño (14 %), seguido de Cundinamarca (10 %) y Huila (7 %).