Existen unos factores que hay que considerar al momento de plantearse la gerencia de una finca. El gerente toma sus decisiones para resolver y prevenir problemas como para elegir lo más conveniente entre varias alternativas, es decir, la decisión hace al gerente responsable de las consecuencias, por eso hay que plantearse ser un gerente de éxito, y para hacerlo, debe considerar estos aspectos expuestos por Alexander Bermúdez Barboza en un capítulo de un texto llamado Avances en la ganadería doble propósito. (Lea: Conozca 4 elementos para ser un buen gerente de finca)

1. El punto de partida para alcanzar el éxito son los registros. Muchos productores agrícolas manejan su negocio sin llevar registros de control. Otros los llevan de un modo inadecuado o no les prestan la debida atención. Bermúdez Barboza menciona que el punto de partida del agronegocio está en los registros y principalmente en la contabilidad, por lo que, quien no cuenta no conoce lo que tiene, no sabe lo que recibe o gasta y no puede saber con exactitud si gana o pierde.

2. La finca debe crecer desde adentro. Actualmente, los recursos son menos abundantes y más difíciles de conseguir. Ahora, más que nunca, la finca tiene que ser capaz de gerenciar excedentes para reinvertir, a esto se le llama, ‘crecer desde adentro’. Esto no significa que se descarte la posibilidad de conseguir créditos o de aprovechar oportunidades para obtener otros recursos, por lo tanto, lo que se plantea es que la finca debe ser capaz de acumular parte de sus excedentes.

3. Es necesario evitar los desperdicios, teniendo en cuenta que este término hace referencia a las condiciones de ineficiencia que no permiten aprovechar los recursos al máximo. Entre esas condiciones de desperdicios o ineficiencia, se puede señalar ejemplos como perder superficies sembradas por descuidar algún aspecto, aplicar una sobredosis de fertilizantes por no calibrar los equipos o no tener un análisis de suelos, etc. Lea: 3 pasos para que un ganadero se convierta en gerente eficiente)

4. Ganar más mediante la mejora del uso de los recursos, siendo esta la meta. Una de las estrategias seguidas en el paso por las empresas agropecuarias fue la de ganar volúmenes de dinero gracias a la inversión en grandes extensiones. Esta puede ser una forma de desperdiciar recursos y resulta ser una buena vía cuando estos son baratos y abundantes. Por lo que, en estos momentos el planteamiento debe ser ganar más por el volumen producido, que por el volumen gastado. Claro que para producir hay que trabajar bien para que la inversión rinda lo más posible.

5. Ver más allá de la cerca de la finca, teniendo en cuenta que el producir exitoso siempre ha sido aquel que ha sabido aprovechar las oportunidades y se ha dado cuenta a tiempo de los riesgos. Estar siempre bien informado, averiguando que pasa más allá de las cercas de la finca, es una necesidad. Así se pueden obtener los datos indispensables para decidir acertadamente, aprovechar las oportunidades que se ofrecen y estar preparado para los imprevistos.

6. ¿Es rentable el negocio agropecuario? Bermúdez Barboza hace referencia a cuánto dinero se puede obtener por cada peso invertido en la producción. La rentabilidad se consigue mediante el esfuerzo, la planificación y el control, pero depende de cada caso en particular. El agrogerente debe seleccionar bien lo que se va a producir para manejar sus recursos adecuadamente, planificando y previendo los resultados para garantizar una buena rentabilidad.