Juan Camilo Tamayo es un joven ganadero que a sus 37 años está convencido que la evolución agropecuaria está en la implementación de modelos sostenibles y bienestar animal, razón por la que sueña viendo a Colombia como líder en producción agropecuaria sostenible para el mundo.
Este ganadero es administrador agropecuario de la región del Magdalena Medio específicamente de Puerto Berrio, lugar donde tiene su explotación. Es un joven que ama lo que hace y que entendió que hay que darle un uso racional a la tierra, que los potenciales agroecológicos deben ser aprovechados y manejados en pro del desarrollo agro-empresarial.
Un gran hombre construye una gran familia
El mayor ejemplo de Tamayo es su padre, Evelio Tamayo, ganadero y comerciante agropecuario que murió hace 23 años. En estos momentos es el líder de la familia que está conformada por su madre, “Martha Escobar, una artista apasionada por la literatura y el campo, mi hermana Natalia Tamayo quien es ganadera y artista reconocida. Además de mi primo Carlos Tamayo, bufalero con quien trabajo de la mano y mi pareja, Isabel Moreno quien también es ganadera y con la persona que comparto todos mis sueños”, expresa.
De esa familia nace el amor por el campo, pues el productor considera que lo lleva en la sangre por tradición. Sin embargo cree que tiene claro este descubrimiento desde “un momento en especial cuando estaba en 1° de primaria, pues recuerdo que la profesora dijo que dibujáramos lo que quisiéramos ser cuando grandes, y mientras mis compañeros dibujaban un cantante, un bombero, un futbolista, yo estaba dibujándome y al lado tenía una vaca, feo el dibujo pero hermoso el recuerdo”, agrega con gran nostalgia.
Motivación para vivir para y por el campo
El productor menciona que la motivación se la transmitieron sus padres mediante su educación, pues ellos lograron que se enamorara del campo, le enseñaron a vivirlo y eso es algo que formó su identidad.
Uno de factores principales que dice Tamayo es que “la gran motivación ha sido trabajar en pro de la sostenibilidad, en buscar siempre la forma de lograr ser ejemplo de una nueva idea, de ser creativo o de simplemente ser ejemplo de atreverse y poderlo compartir sin tapujos”.
Considera que Colombia tiene un potencial inmenso en el sector agropecuario, pero para eso el país tiene que evolucionar más en las percepciones sobre el aprovechamiento del uso de la tierra. Dentro de su región ha promovido en la ganadería la implementación de pastoreo regional y ganadería regenerativa. (Lea: César Gómez, un profesional que sueña con tener una finca escuela de muchos campesinos)
Además, “ha trabajado en pro del desarrollo del sector porcícola que está en niveles de desarrollo mínimos en la región debido a que no teníamos certificación como libres de peste porcina pero que ya es un logro nuevo de este mes, pues luego de muchos años de reuniones, exámenes y paciencia, se logró la certificación con la cual podremos producir cerdos para todo el país”, dice Tamayo.
Hoy en día el productor está incursionando en la avicultura bajo el sistema de gallinas en pastoreo, que ha sido una grata labor pues se ha podido evidenciar que es muy posible desarrollar una marca de un producto en la propia finca, dar valor agregado y comercializar en importantes supermercados de la ciudad.
“Hoy nuestra marca de llama Love Eggs Avicola. Es por esto que a veces me molestan con cariño y me dicen ‘profesor yarumo’ porque me la paso contando sobre las experticias vividas y las comparto en redes @juancamilotamayo @loveeggsavicola”, afirma.
Una vida sin obstáculos no es bien vivida
El joven pero experto ganadero señala expresa que nunca se le ha pasado alejarse del campo, pues no se ve viviendo una vida lejos de sus tierras, pero “si llegase a ser imposible estar aquí en el país, emprendería en el agro donde sea que llegue”.
Todo esto teniendo en cuenta que en el agro siempre existen dificultades nuevas a las cueles hay que darle frente todos los días, y “hay que transformarse en veterinario, mecánico, ingeniero, meteorólogo, topógrafo, financiero, comercial, contratista, profesor, plomero, oficial, etc.”, comenta.
En esta trayectoria de casi una vida, Tamayo sostiene que han existido obstáculos públicos que ha podido superar como los relacionados con las vías o dificultades que no solo él ha enfrentado sino que es el diario vivir de los ganaderos del país, quien también cree que la falta de seguridad “nos ha transformado a los ganaderos en hombres y mujeres muy fuertes”.
Pero los obstáculos se superan y comienzan a llegar los logros que han sido compartidos en equipo con la familia, amigos y con el Comité Regional de Ganaderos de Puerto Berrio (Coregan), con quienes “siempre he trabajado de la mano para buscar soluciones que traigan beneficios para la región. Muchos han sido recursos para el sector, representados en financiación para sistemas productivos, capacitaciones, acompañamientos, múltiples trabajos sociales, convocatorias, entre otros”, asegura Tamayo.
El campo en Colombia, una preocupación constante de Tamayo
El ganadero considera que en Colombia hay una falta inmensa de determinación para proteger a los productores agropecuarios, pues son “insuficientes los esfuerzos que se están haciendo. Es por esto que necesitamos de 5 factores importantes”, comenta.
El primero es que se necesita contar con un sistema de seguridad pública confiable especialmente en la parte judicial, pues es donde mueren muchos esfuerzos de la fuerza pública y de los mismos productores que están siempre al frente de la situación.
El segundo problema que más aqueja al país es la corrupción, pues como lo menciona Tamayo, “tiene un impacto negativo sobre la asignación y utilización de recursos para apoyar a los productores. Cero impunidad para los corruptos”. En ese mismo orden agrega que se necesita estabilidad política, debido a que la polarización crea panoramas que afectan directamente al sector agropecuario, muy claramente lo que se vivió con el reciente paro nacional.
Además expone que hace falta mucho desarrollo en infraestructura vial así como incentivos fuertes para que se aumente la producción la transformación, que “mejorando los ya mencionados aspectos deben estar acompañados de reducción de importaciones, que afectan directamente el precio del productor local. A esto hay que agregarle que se necesita capacitación, financiación y regulación”.
Esta es la razón por la que Tamayo sueña viendo a Colombia como líder en producción agropecuaria sostenible para el mundo, en donde los productores puedan vivir tranquilos y sin temores de hacer inversión y perderla sea por problemas de seguridad o “porque una política radical ‘espante’ el progreso”, dice.
El joven ganadero afirma que el país tiene condiciones para cumplir con este sueño porque se cuenta con múltiples cultivos que se dan en excelente calidad como café, banano, aguacate, limones, guanábana, cacao, caucho, entre otros. Además, ve a Colombia creciendo fuerte con la exportación de cerdo, huevo y pollo, porque acaban de declarar el país libre de Newcastle.
Finalmente, Tamayo expresa que “sueña con ver miles de certificaciones de carbono neutro, pagos por servicios ambientales y condonaciones de impuestos a zonas de reserva”. (Lea: Colfe, pequeños productores de leche con ganas de seguir creciendo)