César Augusto Delgado Jiménez es un médico veterinario y productor que desde hace más de 17 años está dedicado a la producción de ovinos en su granja Santa Catalina. Su amor por el campo surgió de una larga tradición familiar.
Es un hombre Boyacense que se ha formado en una familia que ha trabajado durante muchos años en el sector agrícola y pecuario, especialmente bajo los principios de la productividad y la sostenibilidad, por lo cual no solo lo considera un trabajo sino una pasión y compromiso con la empresa familia. (Lea: Exaltar las cualidades del ovino caprino es una de las funciones del grooming)
“Soy un padre de familia, esposo y médico veterinario de profesión que tiene especialidad en la producción animal, además de estar apasionado por el campo del sector ovino”, detalla Delgado Jiménez.
Más allá de la experiencia, entrega y amor por el campo
Delgado Jiménez se encontraba cursando su octavo semestre en la Universidad de Ciencias Aplicada y Ambientales (UDCA) cuando decidió trabajar en la producción ovino caprina, especialmente cuando en el área de producción bovina desarrollaban una investigación en bioterio.
“Estábamos midiendo una conversión alimenticia y ganancia de peso en 20 ejemplares ovinos con cubierta lanar bajo un sistema de estabulación completa durante 4 meses, por lo que cuando obtuvimos los resultados me surge la idea de trabajar en producción ovina, pues existía una gran demanda de ovino para el consumo en ese momento”, expresa el especialista.
A partir de ese entonces y con los estudios profesionales basados en medicina veterinaria, este especialista se convirtió en un disciplinado productor ovino que durante muchos años ha tratado de formar su ganadería bajo los principios empresariales, siendo estos tan importantes para el éxito de una explotación en la actualidad.
19 años de experiencia son las que ha forjado este productor en su empresa familiar con la filosofía de “empresarios dedicada a la producción de ejemplares ovinos con alto valor genético, por lo que nuestra principal labor y función en el campo, específicamente en nuestra granja ha sido el compromiso con los componentes fundamentales”, detalla Delgado Jiménez.
Su trabajo se ha enfocado en una unidad pecuaria donde esté integrada la nutrición, reproducción, sanidad, administración, pues estos constituyen el insumo primordial para que un sistema productivo sea exitoso, como él mismo lo manifiesta.
Granja Santa Ovina Santa Catalina
Esta explotación ovina se encuentra ubicada en Sogamoso en el departamento de Boyacá y desde hace muchos años ha venido formando un reconocimiento en la zona gracias a la labor y al alto valor genético de sus animales. “Nuestra granja ha obtenido los mejores resultados en las ferias más importantes del país, por lo cual ha sido premiada con los mejores galardones”, manifiesta orgulloso el productor. (Lea: 3 importantes beneficios del pastoreo integrado en granjas ovinas caprinas)
Santa Catalina es reconocida por el manejo integral y la calidad genética de los ejemplares producidos, pues todos estos son producto de algunas importaciones, que gracias al trabajo de Delgado Jiménez han venido replicándose en el laboratorio de biotecnología reproductiva que tienen, por lo cual se han dedicado a la inseminación artificial, lavado y transferencia de embriones.
“Para mí, el factor más importante es la genética de alta pureza de pedigree con vocación productiva cárnica que permite calidad para un sector que demanda productividad en las líneas bases establecidas en Colombia”, asegura Delgado Jiménez.
Ese reconocimiento y ese trabajo en el sector genético de los ovinos es lo que impulsa a este productor a ser cada día mejor y a trabajar de forma permanente en el crecimiento no solo de su ganadería sino también del sector al cual pertenece.
“Día a día tenemos que fortalecer los distintos componente que constituyen a nuestra empresa, pues a la par debemos garantizarnos como única granja certificada en buenas prácticas ovino caprina, de tal forma que es importante que se cumpla su objetivo dentro de la cadena ovina del país”, sostiene Delgado Jiménez.
Los obstáculos que nunca faltan
Durante su experiencia en el sector agropecuario, especialmente en la producción de genética ovina, el productor considera que se han presentado muchos obstáculos, pero el principal está ligado a las problemáticas del sector. (Lea: ¿Sabe usted qué es el pastoreo integrado en ovinos?)
“El principal obstáculo es la falta de agremiación que se constituye en la necesidad del sector para realizar repoblamiento genético que permita producir más volumen de calidad en menor tiempo para que el ciclo de productividad se acorte supliendo la demanda de cordero terminal”, explica detalladamente Delgado Jiménez.
Su sueño en el campo del país
Finalmente, el sueño de este productor es el mismo que miles de colombianos que trabajan en el campo y que tienen que enfrentarse a las inclemencias del clima y las distintas dificultades que aparecen día a día.
“Sueño con que los insumos pecuarios y la maquinaria tengan un incentivo, para que los nichos de mercado aprecian y valoren más las granjas multiplicadoras con el fin de hacer extensión y repoblamiento”, concluye Delgado Jiménez.