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columna

Yo voto, por María Fernanda Cabal

por: Senén González Vélez- 31 de Diciembre 1969

Independientemente de las consideraciones que todo caballero debe observar para con una dama, que es el respeto y las sanas formas de trato, el genio, figura y esencia de la aspirante CABAL a la Presidencia de Colombia, es tan único, que no tiene replica, ni menos imitación y por lo mismo su presencia inspira confianza, solidez, por la convicción y seguridad que tiene para hablar.

Por Senen Gonzalez Velez.

Independientemente de las consideraciones que todo caballero debe observar para con una dama, que es el respeto y las sanas formas de trato, el genio, figura y esencia de la aspirante CABAL a la Presidencia de Colombia, es tan único, que no tiene replica, ni menos imitación y por lo mismo su presencia inspira confianza, solidez, por la convicción y seguridad que tiene para hablar.

Admiro su coraje y coherencia, tan escasos hoy día, en que reina el todo se vale, el arribismo y la hipocresía, que se convirtieron en la alcahueta para quedar bien, sobre todo en aquellos, que están con todos y no están con nadie.

En CABAL convergen muchos factores positivos, que deseo resaltar en mi nota editorial. - Desde que la escuché por primera vez en el congreso de la República, supe, que se trataba de un fenómeno político. El brillo de su lógica y la capacidad de su talento, han demostrado que es diferente.

Es una mujer que está organizada mentalmente, por lo que conoce la necesidad del país, en el detalle y el concepto.

Es flemática, no se altera, es pausada, pedagógica en sus alocuciones, cosa que permite entenderla sin mayores esfuerzos.

Es de nobles sentimientos, profundamente poseída de principios y valores y con indeclinable temor de Dios, que es el único paso, para alcanzar la sabiduría.

Dispone de un carácter fuerte, pero razonable, lo suficientemente claro, conciso, y maternal, para alinear hasta el sacerdote del hogar.

Durante todo el proceso de sus intervenciones en recintos cerrados, o bajo la modalidad de lo virtual, nos ha deleitado con toda esa gama de conocimientos, que ha expresado con dominio propio, tanto en lo económico, social, legal, institucional, justicia, seguridad, y equidad.

Unas de sus grandes preocupaciones, de las tantas que tiene, es la referente a los tratados internacionales, que estamos seguro que, durante su gobierno, los hará revisar, o cumplir, Estamos perdiendo nuestra soberanía marítima.

Habla con sentido amistoso sobre el porvenir de los estudiantes del país, a los que aspira darles las mayores oportunidades, para que obtengan su capacitación, y puedan generar sus propias empresas, mediante el acceso fácil, a capitales de trabajo de fácil adquisición.

Conoce perfectamente el sector agropecuario, del que habla con propiedad, señalando las necesidades que con urgencia requiere el campesino, convencida, que la despensa de la nación, está en la explotación de la tierra, por lo que hay que recurrir a esta urgentemente. Para lograrlo, se hace necesario la presencia efectiva de la seguridad en todo el país, que debe ser un aliado para generar confianza en la inversión, lo que crearía mayores puestos de trabajo, que impulsarían el progreso del sector productivo del país. Por ello, muchas veces nos dice, que el desarrollo del país comenzó al revés.

Nos muestra su profunda preocupación por la niñez desamparada, que liga magistralmente con la necesidad de fortalecer la importancia vital de los hogares, para concientizarnos, que la vida, hay que protegerla desde que está en el vientre materno.

Apunta su visión, para que el concepto ciudad región, estén íntimamente ligados, como una forma de sincronizar sus acciones en la gestión pública.

Alguien decía que se repite la historia de la dama de hierro, y el turno ahora le tocó a Colombia.

Con María Fernanda, se rompe el mito del machismo, para darle espacio a las mujeres, que han demostrado que son más honestas que los varones, y que el carácter indeleble que les acompaña, me refiero a las que tienen una formación integral, normal, cristiana, honran a Dios, y la moral de la patria, antes que debilitarla. Si los colombianos nos unimos, se salvó la patria.

Dale la oportunidad a la democracia, con CABAL.

Editorial- Punta de Lanza. Noviembre 1 del 2021. Sengove.