Hasta el 16 de septiembre de 2024 tuvimos noticias sobre la imposición de medidas compensatorias por la entrada de leche en polvo desde EEUU. Para entonces el Ministerio de Comercio había colocado un extra-arancel provisional de 4,86% durante un periodo de cuatro meses en el marco de la investigación preliminar por la entrega de subsidios de parte del gobierno de EEUU a sus productores de leche, que solo en 2023 llegó a US$1.209 millones, unos 4,7 billones de pesos.
Al respecto, dicha medida provisional debió terminar el pasado 16 de enero, dejando la importación de leche en polvo proveniente de EEUU con un arancel de 0% para las primeras 18.987 toneladas y de 2,2% al resto de volumen ingresado. De allí que en el primer mes del año solo se haya agotado el 6,27% del contingente del TLC-EEUU y se haya importado más leche desde la Unión Europea.
En 2024 desde EEUU se importaron 23 mil toneladas de leche en polvo, el 98% de ellas leche en polvo descremada que es mucho más barata que la leche en polvo entera. Tal volumen, al convertirse en leche líquida representa alrededor de 194 millones de litros, el 6% del acopio formal industrial. Claro, no toda la leche se convertirá en leche líquida sino se mantendrá en polvo dado el destino de uso, como la industria de chocolates o galletas. Sin embargo, esos 194 millones de litros bien pudieron ser leche colombiana pulverizada, bien leche en polvo entera o descremada que pudo haber abastecido a dichas industrias.
De nuevo reitero la importancia de avanzar en mejorar la capacidad pulverizadora del país, lo habíamos propuesto como elemento estructural de la política pública para evitar posteriores crisis lecheras, ¿qué habrá pasado? Mientras llegan esas respuestas volvamos al tema de la medida compensatoria.
Desde el 16 de septiembre de 2024 MinComercio siguió con el curso de su investigación definitiva, pero llegó el 16 de enero de 2025 y aun no se cierra dicho proceso. El hecho es que para EEUU resultará muy difícil dejar de dar apoyos a sus productores de leche por lo que resultaría lógico que mientras el país del norte los siga subsidiando, Colombia aplique un extra-arancel a la leche y derivados que se importen, eso al menos en el campo del deber ser.
Sin embargo, ya en el campo de la realpolitik, un arancel a la leche en polvo proveniente de EEUU evidentemente no le gustará al gobierno norteamericano siendo muy sencillo predecir su reacción: alguna medida de retaliación arancelaria en algún producto agropecuario de origen colombiano, más en un entorno político y de relaciones bilaterales muy dañadas. En dicho caso, podría pensarse entonces en llevar el caso a la Organización Mundial del Comercio –OMC–, pero vale la pregunta si hoy la OMC es capaz de salvaguardar el multilateralismo comercial dado el nuevo gobierno de EEUU.
La pregunta que queda abierta entonces es, si a pesar de toda la evidencia de comercio injusto sobre los productores de leche colombiana, ¿MinComercio y el Gobierno Nacional no se echarán para atrás en la protección de nuestro sector lechero como ocurrió en 2021 con la solicitud de salvaguardia también para el sector lechero? Lo veremos prontamente.