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Con esperanza por lograr la adopción de medidas en procura de solventar la grave crisis que atraviesa el sector lechero en Colombia, hemos sido notificados de parte del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, de la expedición de la Resolución No. 192 del 3 de julio de 2024, publicada en el Diario Oficial No. 52.807 del 4 de julio de 2024, mediante la cual, la Dirección de Comercio Exterior del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo ordenó el inicio de una investigación de oficio de carácter administrativo para determinar la existencia, cuantía y los efectos en Colombia por la concesión de presuntas subvenciones en las importaciones de leche en polvo que ingresan a Colombia, originarias de los Estados unidos de Norteamérica.
No está de más recordar la grave situación que enfrenta el sector lechero en el país, situación provocada tanto por factores de estacionalidad en la producción, como por la aplicación de los programas de desgravación pactados con los Estados Unidos de Norteamérica y con la Unión Europea, a través de los Tratados de Libre Comercio vigentes con estos países, lo que ha provocado un incremento sustancial y sostenido de las importaciones de leche en polvo americana a Colombia, produciendo un grave daño a la producción nacional.
Por tal motivo, es que recibimos de la mejor manera, y con profunda esperanza para las más de 350 mil familias campesinas que derivan su sustento diario de la producción lechera, la apertura de este proceso de investigación con relación a las prácticas desleales de comercio, subsidios y ayudas internas, aplicadas por los Estados Unidos de Norteamérica, en beneficio directo de sus productores y en detrimento, por supuesto, de los productores colombianos.
Entendemos que, con la imposición de una medida compensatoria a las importaciones de leche en polvo provenientes de los Estados Unidos de Norteamérica, se corrige el efecto perverso de los subsidios y elimina la competencia desleal que tiene que afrontar el sector lechero colombiano, en tanto, la mediad compensatoria permitirá, incrementar el arancel de ingreso de la leche en polvo a Colombia, y así, eliminar el efecto perverso de los subsidios.
Así mismo, resulta de capital importancia que la citada investigación, y la eventual adopción de la medida compensatoria cuente con la celeridad necesaria en procura de lograr una inmediata protección al sector lechero colombiano, más aún al tener en consideración que en menos de dos años el comercio bilateral para la leche en polvo quedará totalmente libre de aranceles con los Estados Unidos, es decir, estará sujeto a una desgravación total.
No deja de ser propicio, hacer referencia y recordar la solicitud que, en el año 2021, presentó la Federación Colombiana de Ganaderos - FEDEGAN al Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, con relación a la implementación de una medida de salvaguardia a las importaciones de leche en polvo provenientes de los Estados Unidos de Norteamérica.
Es de resaltar que el informe final presentado con relación a la solicitud de implementación de una medida de salvaguardia, elaborado por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo en 2021 indicó, de manera expresa, que existe “Daño grave en los siguientes indicadores económicos: Volumen de producción respecto al Consumo Nacional Aparente, ventas nacionales (acopio formal) respecto al volumen de producción, importaciones investigadas respecto al volumen de producción, productividad, volumen ventas (acopio formal) respecto al Consumo Nacional Aparente e importaciones investigadas respecto al Consumo Nacional Aparente”.
No obstante, a pesar de tener este concepto claro y diáfano, que a nuestro juicio constituye una evidencia clara del perjuicio grave al sector lechero colombiano, el Comité de Asuntos Aduaneros, Arancelarios y de Comercio Exterior de la época, más conocido como Comité Triple A, optó por no acoger las recomendaciones de la Subdirección de Prácticas Comerciales, respecto a la salvaguardia invocada por FEDEGAN.
Si bien la decisión negativa del Comité Triple A obedeció al riesgo de recibir medidas de compensación en otros sectores de la economía colombiana con amplia presencia en el mercado estadounidense, lo que se traduciría en el posible incremento de los aranceles de ingreso al mercado americanos para productos como el café o las flores, tal previsión no aplicaría para el caso de la adopción de una medida compensatoria, en tanto, que en el mismo Tratado, no se incluyó tal previsión, u obligación, a la parte que adopte una medida compensatoria, de otorgar medidas de compensación que afecten a cualquier otro sector de la economía, por lo que consideramos, que tal argumento, en esta oportunidad, quedaría descartado y no tendría aplicabilidad.
De allí la importancia de avanzar de manera decidida, en una estrategia de la mano del Ministerio de Comercio, que se materialice en decisiones concretas de protección al sector lácteo colombiano frente a la permanente ola importadora de leche en polvo desde los Estados Unidos de Norteamérica.
