Pero a pesar de sus perjuicios, terminará el gobierno colombiano canjeando al sector para permitir la entrada de “x” productos colombianos a los mercados del Pacifico Sur. ¿Cuáles son mis razones para pensarlo? En primer lugar porque Australia y Nueva Zelanda han manifestado su intención que se abra el mercado colombiano de la leche pues al fin y al cabo son ellos los productores y comercializadores más eficientes del planeta. Son los principales formadores de precio del mercado mundial. En segundo lugar porque al Gobierno actual poco le ha interesado la ganadería colombiana y mucho menos el sector lechero, convirtiéndolo en canjeable. Por supuesto hay que ver los “mea culpa” respectivos. Y con los mea culpa me refiero a que la industria lechera es insignificante en sus exportaciones, a pesar del esfuerzo productivo que ha hecho el eslabón primario para aumentar su producción que en 2017 fue de 7.094 millones de litros. Recordemos que entre 2013 y 2014 nuestra industria poco exportó a pesar que los precios por tonelada de la leche en polvo entera fueron superiores a los USD 5.300. Tan perjudicial es establecer un TLC con Australia y Nueva Zelanda, en el marco de la Alianza Pacifico, que la preocupación no solo es de los ganaderos sino de la industria y las cooperativas como eslabones comercializadores pues la llegada masiva de importados no solo sería de bienes intermedios como leche en polvo o lactosueros, sino de bienes finales como quesos, mantequillas y bebidas lácteas que competirían directamente con la industria lechera nacional. ¿Qué hacer entonces? Sería fundamental para la cadena de valor que el sector lechero fuera excluido de dicho TLC, pues no existe necesidad de importación de bienes que con suficiencia se producen en el país. Es poco factible que se de esa exclusión. Es necesario, entonces, crear competitividad interna con la baja de los precios al consumidor final por parte de los transformadores y supermercados. La industria debe revisar su estructura de producción y examinar sus ineficiencias. No es lógico que en almacenes de bajo costo usted pueda encontrar el litro de leche UHT en $1.700, pero en los supermercados tradicionales y marcas tradicionales el litro tenga un precio de $3.300. De otro lado, la industria debe convertirse en exportadora sin dependencia de lo que los ganaderos le puedan subsidiar a través del Fondo de Estabilización de Precios. Lo que indica mayor eficiencia en transformación y logística. El TLC con Australia y Nueva Zelanda le aporta poco al sector, la tecnología y asistencia con la que ellos cuentan, y que es de nuestro interés, de todas maneras estarán disponibles pues dicho acuerdo comercial es una realidad. La decisión está en manos del actual gobierno y no creo que vaya a ser la mejor. Preparémonos.
¿Más TLC, más leche?
Por - 28 de Febrero 2023
En recientes días alguien me preguntaba sobre la utilidad para el sector lechero colombiano de establecer un Tratado de Libe Comercio con Australia y Nueva Zelanda. La respuesta es elemental: no es útil. Por el contrario es más perjudicial que el TLC con Estados Unidos y la Unión Europea en materia láctea.