La boñiga, o bosta, es un fertilizante que por supuesto varía según la dieta que tengan los bovinos. Cuando piense en cambiar la suplementación de sus animales, o mejor aún, cuando piense en introducir un suplemento a un predio que no suplementaba, esté seguro que la mejora no la verá únicamente en los individuos que lo consumen, los resultados los notará en mejores pastos, mayor producción de forraje y mayor capacidad de carga.
Alguna vez, en el altiplano Cundiboyacence, en una lechería que no suplementaba empezamos a darle concentrado a las vacas de ordeño. Al principio se asustaban cuando veían el grano en el puesto, con el tiempo fueron aprendiendo a comerlo. En menos de dos meses se empezó a ver el cambio en la producción de forraje de las praderas.
En otros predios donde se realiza la finalización del ganado de ceba comercial, se empezó a suplementar los animales con pollinaza tratada para ser apta para consumo bovino; los cambios en la calidad y cantidad del pasto permitieron un aumento en la capacidad de carga, adicional al aumento de ganancia de peso.
Hay factores que influyen en la distribución del abono, en este caso la boñiga, y la incorporación al suelo. Es mejor en zonas húmedas, sería ideal que aún existiera alta población del cucarrón estercolero, y la forma como se pastoree. Todas los ganaderos debemos ser conscientes que cada ganadería es un mundo diferente. Hay que saber que puede comer el bovino y realizar suplementaciones dirigidas a ellos; pero siempre recuerde que si su vaca come bien le dará un buen fertilizante.
Mariana Navarro S
Médico Veterinario Zootecnista