Empieza el año y a las cero horas del primero de enero los contingentes de leche en polvo que se negociaron en los Tratados de Libre Comercio con EEUU y con la Unión Europea inmediatamente se activan. Para 2025 el cupo sin arancel proveniente de EEUU es de 18.987 toneladas, y al agotarse este se aplicará un arancel apenas de 2,2%. En el caso de la leche en polvo proveniente de la Unión Europea el contingente es de 8.800 toneladas con un arancel extra-cupo de 18,4%.
Recordemos que, en un año, desde el primero de enero de 2026, ya no habrá contingente para la leche en polvo importada desde EEUU, sino que se tendrá libre comercio, es decir toda la leche que se importe desde el país del norte no pagará arancel. Lo mismo ocurrirá con la leche en polvo importada desde la Unión Europea desde el primero de enero de 2028.
Esa es la realidad, la renegociación, o al menos revisión de los TLC que alguna vez se anunció nunca se concretó, y el sector lechero debe convivir con tal situación de competencia, en muchas ocasiones desleal, dados los aparentes subsidios que estos países otorgan a sus productores lecheros y que generan asimetrías y graves repercusiones en la producción colombiana.
Ahora bien, frente al cupo de importación de leche desde EEUU, a 7 de enero solo se ha importado el 2,41%, es decir 457 toneladas de las 18.987 con arancel cero, que resulta poco dinámico si vemos el comportamiento de años anteriores en donde el cupo se agotaba en más de 40% el primer día del año.
Pero tal comportamiento tiene una explicación sencilla, y es que hasta el 16 de enero de 2025 está vigente una sanción parcial del Ministerio de Comercio consistente en un extra-arancel de 4,86% que se impuso en septiembre pasado por cuenta de la investigación que realiza esta cartera por el otorgamiento de subsidios por parte del gobierno de EEUU a sus productores de leche.
En otras palabras, desde el 17 de enero de 2025 no debe pagarse ese 4,86% y muchas empresas importadoras han decidido aguantar hasta tal fecha. Además, los inventarios industriales de leche en polvo entera, descremada y liquida UHT iniciaron diciembre con cerca de 21 mil toneladas en stock, lo que da espacio para que estas se utilicen mientras llega enero 17.
Lo paradójico es que la producción de leche colombiana ha continuado con buen ritmo a pesar de algunas semanas de verano y aun así se sigue importando ¿por qué? Porque mantener más oferta les permite a muchas empresas transformadoras tener poder de negociación para pagarle un precio más bajo al ganadero. Lamentable. Adicionalmente hay que pensar en que vía acuerdo comercial CAN se están importando alrededor de 7 mil toneladas de leche en polvo desde Bolivia, un país con un tercio de nuestro hato ganadero, pero que ha definido políticas agroindustriales claras que estimulan su exportación.