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columna

Básicos para el éxito de la reforma agraria integral

por: Miguel Ángel Lacouture Arévalo- 31 de Diciembre 1969

Consideraciones acerca de la tenencia de la tierra y la oferta de infraestructura

El sector agropecuario en este gobierno es uno de los pilares fundamentales con los que buscan posicionar en la economía nacional, la política de “Colombia Potencia Mundial Agroalimentaria“, soportada en la redistribución de la tierra a campesinos que no la tienen o la tengan insuficiente. Desde siempre este ha sido uno de los principios de las ideologías de izquierda en sus gobiernos, este o en anteriores que, si bien no han sido elegidos bajo estas banderas, comparten este principio.

La tenencia de la tierra, en cabeza de las poblaciones menos favorecidas no es garantía de sacarlo de la economía de mera subsistencia en la medida que el Estado no garantice la construcción, funcionamiento y mantenimiento de la infraestructura básica productiva que en marcha ofrezca seguridad del éxito de los emprendimientos productivos, entregar tierra pelada, no es garantía de nada, es repartir pobreza, es sembrar esperanzas que jamás serán cumplidas por parte del Estado, es condenar al tenedor a la estabilidad de vida en las líneas de pobreza y miseria.

A/ Agricultura se escribe con “A”, de agua, por ello es necesario se garantice la puesta en marcha proyectos de riegos y drenajes que hay pendientes de culminar y, emprender nuevos distritos que garanticen estabilidad del suministro del agua durante 365 días del año, más, en un país donde la estacionalidad ha venido siendo variada en largos periodos de sequías y lluvias a consecuencia de la frecuencia constante y periódica de los fenómenos del Niño y Niña. Para lograrlo hay mecanismos como las Asociaciones Público Privadas, Concesiones a empresas de servicios públicos nacionales, departamentales o municipales o la construcción y administración directa por el Estado.

B/ Construcción y mantenimiento de vías terciarias y secundarias, que permitan al productor colocar en mercados de consumo sus productos en mejores condiciones de calidad y precio. Para este efecto el Gobierno Nacional desmembró del Invias, el Invir, Instituto de vías rurales, que se encargará en adelante de estos menesteres. Esperamos no se trate de un nuevo botín burocrático y contratación por parte de los partidos políticos, en la repartija que se hace por el gobierno nacional en búsqueda del respaldo a las reformas que pretende hacer pasar en el congreso en contra de la voluntad del constituyente primario.

C/ Programas de acceso al crédito y financiamiento a pequeños empresarios del campo que por diferentes razones no son sujetos de créditos. Hemos expuesto cómo el gobierno Petro utilizando los medios periodísticos ha atacado el proyecto de ley que permite la irrigación de créditos a través de las asociaciones y cooperativas a sus asociados. Los sujetos a los que se le debe apuntar en particular, son quienes desarrollen la empresa agropecuaria, con las mejores tasas posible, sin tener que ser perteneciente a uno de los grupos minoritarios en particular.

D/ Estructuración de programas de mercadeo y colocación de la producción agropecuaria, que permita al productor rural conocer con anticipación y forma segura lo que puede llegar a rentar su emprendimiento una vez se hayan asegurados los anteriores básicos de la infraestructura productiva agropecuaria. Ya Colombia tuvo experiencia al respecto con Agricultura Por Contrato, programa que permitió comprometer la compra de la producción agropecuaria, al tiempo servía de instrumento de apalancamiento financiero, ya que el contrato, compra venta a futuro, servía como instrumento de garantía para financiación suficiente para la colocación de créditos.

Una vez garantizado estos básicos de infraestructura productiva, debería venir la segunda parte, la reforma Agraria Integral, esta sí, acompañada de proyectos productivos, preferiblemente desde la asociatividad que permita la productividad efectiva del sector rural, no como se hace hoy, sin la garantía básica de los mínimos anotados, para que de una vez por todas, San Isidro Labrador descanse de su trabajo, que los campesinos puedan asegurar la producción, colocación y comercialización de sus cosechas antes de iniciar sus emprendimientos.