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Esta semana el Ministerio de Agricultura actualizó el sistema de pago por calidad de la leche que se encuentra incluido en la Resolución 017 de 2012. Esta normativa incorpora la calidad composicional del litro de leche de acuerdo con el contenido en términos de cantidad de gramos para sólidos totales, proteína y grasa.
Durante más de una década algunos han entendido por desconocimiento, otros por conveniencia, que anualmente lo que se actualiza es el precio del litro de leche y esto no es así. El precio del litro de leche lo siguen fijando dos elementos.
El primero es el mercado a través de la interacción entre oferta y demanda, por eso cuando hay poca leche, como es el caso de los últimos dieciocho meses, el precio sube incluidas las bonificaciones voluntarias; y cuando hay mucha leche el precio baja.
El segundo es el sistema de pago por calidad que determina los valores mínimos de remuneración por contenido de grasa, proteína y sólidos, lo que hace que el precio que le pagan a un productor por un litro de leche sea diferente al que le pagan al vecino más cercano, dada las diferencias en calidad que tengan cada uno de ellos.
Ahora bien, ¿por qué ha habido menor oferta de leche en el último año y medio? Tres razones fundamentales:
La primera: el intenso invierno que afectó al país de manera consecutiva durante 31 meses. Muchos creen que con más lluvias más leche, pero resulta que el exceso de agua es perjudicial para la producción.
La segunda: los altísimos costos de los insumos y materias primas: granos, suplementos, fertilizantes; afectados por un desajuste de su oferta mundial, así como por una tasa de cambio que en 2022 fue 14% más alta que la de 2021.
La tercera: a pesar de los mejores precios del litro de leche, la rentabilidad se vio muy afectada por cuenta de los altísimos costos, lo que incentivó a diferentes unidades productivas para que se trasladaran de la producción de leche a la de novillos, los cuales han remunerado mejor y han registrado márgenes más atractivos desde 2020.
Tal situación de menor oferta de leche hizo que el precio del litro se incrementara 38% entre diciembre de 2021 y diciembre de 2022. Al respecto, la actualización del valor del gramo de proteína, grasa y sólidos totales, del que hablaba al inicio de este escrito, tendrá un incremento de 26% de acuerdo con la metodología propia al Índice Compuesto del Sector Lácteo, más conocido como “la fórmula”.
No significa esto que si el precio de un litro de leche pagado al productor fue $1.900 en febrero pasado entonces se le incremente 26% para ser $2.394, no funciona así. Ya el mercado en buena medida ha remunerado tal incremento por cuenta de la disminución en la producción de leche, por lo cual el alza de precios dependerá de que la producción se mantenga a la baja o estable en el punto actual y de que el nivel de importaciones no se incremente para sustituir la leche de origen local.
En ese sentido las predicciones meteorológicas hoy indican un 50% de probabilidad que se presente un fenómeno de El Niño desde el cuarto trimestre de 2023, por lo cual en el segundo y tercer trimestre ya podría tenerse una normalización del clima. No significa esto que la producción de leche vuelva a repuntar pues los costos siguen siendo altos, tal vez menos, pero altos aun, y, el precio del novillo gordo sigue siendo atractivo. Menos leche es igual a precios altos, o al menos estables.
@ojcubillosp