Por Blanca Espada
Almacenar la carne en el congelador permite conservarla más tiempo, garantizándonos además el suministro para cuando queramos llevarla a la mesa. Sin embargo, puede ocurrir que nos olvidemos de sacar a tiempo la cantidad deseada y, por tanto, nos encontremos con unos minutos disponibles antes de una comida, en la que quizás también participen familiares o amigos. ¿Qué hacer en esta situación? No te preocupes, hay algunas formas rápidas y fáciles de descongelar carne en minutos. De hecho tenemos un truco que contarte que consiste en el uso de usar dos ollas y con el que podrás descongelar la carne en cinco minutos.
El truco para descongelar la carne en cinco minutos
El truco que os queremos revelar se conoce como el método de la olla doble invertida y requiere, como su nombre indica, dos ollas y una bolsa. Una vez sacada del congelador la carne a servir, hay que introducirla en una bolsa de plástico, una de las que usas precisamente para el congelador son perfecta, sellándola bien con el cierre zip que suelen tener este tipo de bolsas. Llegados a este punto, pasamos al fregadero, en el que se coloca una olla vacía boca abajo, es decir, con el fondo hacia arriba.
Sobre este fondo se colocará nuestra carne previamente metida en la bolsa y sobre ella se colocará una segunda olla llena de agua caliente. La presión de esta segunda olla combinada con el calor que produce el agua que la recubre logrará lo imposible: en tan solo cinco minutos, la carne estará perfectamente descongelada y lista para ser cocinada.
El otro método para descongelar la carne
El agua caliente que acabamos de usar también se puede utilizar en un segundo método de descongelación, especialmente útil cuando trabajamos con carne contada en filetes, lonchas finas o cortes en trozos pequeños. También en este caso, la carne debe embolsarse de manera hermética y luego colocarse en una olla con agua precalentada, revolviendo ocasionalmente. Si es necesario, también puedes rellenar con agua caliente nueva: tardará diez minutos en completar la descongelación. O si lo prefieres puedes rellenar un táper con agua caliente lo pones en el fregadero, y metes dentro la bolsa. En otros diez minutos nuestra carne loncheada o por ejemplo, una pechuga de pollo, estará completamente descongelada.
Evidentemente, quienes dispongan de microondas también pueden utilizar la función específica de descongelación que permite tener los alimentos descongelados ad hoc normalmente en unos diez minutos. Sencillo, ¿no?
Fuente: Okdiario