La exitosa experiencia brasileña de desaceleración de la deforestación en la Amazonía ha captado la atención mundial. Pero serias preocupaciones se mantienen en torno a su posible resurgimiento.   Si bien es importante fortalecer los arreglos públicos y privados para alcanzar la deforestación cero, o al menos estabilizarla en niveles absolutos bajos, es preciso prestar una mayor atención a las acciones necesarias para facilitar la transición desde un modelo de deforestación cero hacia uno de sostenibilidad territorial.   En esto se concentra una reciente publicación del Centro para la Investigación Forestal Internacional (CIFOR), del Centro de Cooperación Internacional en Investigación Agrícola para el Desarrollo (CIRAD) de Francia y de la Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria (EMBRAPA), desarrollada en el contexto del proyecto TerraCert que se ejecuta en el municipio de Paragominas, estado de Pará.   El principal argumento de la publicación es que, si bien frenar el incremento de la deforestación en las fincas es una condición necesaria, no es suficiente para facilitar la adopción de usos de la tierra y prácticas de producción más sostenibles, tanto a niveles de fincas como del paisaje; ambos esenciales para lograr una creciente sostenibilidad territorial en la Amazonía.   Gran parte del debate actual sobre la desaceleración de la deforestación y  la sostenibilidad territorial está relacionado con la mejora de la sostenibilidad en la ganadería, la cual ha sido vista como la principal responsable por la pérdida de bosques en la Amazonía. En este sentido, la extensión de los pastizales es señalada como la principal causa de más de dos tercios de la deforestación total acumulada en la región.   Asimismo, la deforestación generalmente estuvo asociada a la ganadería a mediana escala, aunque también involucró a los pequeños productores.   A la luz de estas pruebas, el pensamiento común sugiere que frenar la deforestación, apoyar la intensificación de la producción ganadera (es decir, permitir una agricultura más intensiva como reemplazo de tierras pastorales menos productivas) simultáneamente y promocionar  sistemas silvoagropecuarios, podrían constituir formas efectivas de apoyo a paisajes más sostenibles en la Amazonía brasileña.   Hasta ahora, un enfoque de  gobernanza que combinaba políticas públicas e iniciativas privadas había sido efectivo en  desacelerar la deforestación. Sin embargo, este enfoque no ha sido capaz de apoyar una transición hacia sistemas de producción más sostenibles. Sobre la base del éxito actual en la reducción de la deforestación, es preciso dar nuevos pasos para lograr la sostenibilidad territorial. Esto requiere combinar arreglos institucionales y opciones sociotécnicas.   Se necesitan identificar nuevos modelos de intensificación técnica para los sistemas de baja productividad en tierras degradadas y adaptadas a las condiciones técnicas, sociales y biofísicas de los paisajes amazónicos. Sin embargo, dado que diversas limitaciones impiden adoptar estas opciones de intensificación, revertirlas requiere que dichas limitaciones sean abordadas de manera coordinada.   Basados en los resultados de  nuestra investigación, sugerimos tres conjuntos de medidas para que esa visión se vuelva realidad, mediante el uso de tecnologías de producción adaptadas, la adopción de sistemas de monitoreo que empoderen a los actores locales y la implementación de acuerdos institucionales público-privados.     Claves para frenar la deforestación   Actualmente, es un hecho sabido que los esfuerzos por dar cumplimiento a las normativas ambientales, junto con los compromisos asumidos por los comerciantes de soya y de la industria cárnica han contribuido a reducir la deforestación. Un paso fundamental fue la adopción de los Términos de Adhesión y Compromiso (TAC), gracias a los cuales la industria cárnica acordó realizar controles más estrictos a sus proveedores, forzándolos de este modo a cumplir con las normativas estatales. Este acuerdo fue seguido por otro firmado entre tres grandes grupos de la industria cárnica y la ONG Greenpeace, con términos similares a aquellos acordados en el marco de los TAC, pero con mecanismos adicionales de control de los proveedores indirectos.   Además de estos dos acuerdos, otro tipo de iniciativas han surgido en la Amazonía brasileña para respaldar el progreso hacia una intensificación sostenible de la ganadería, sobre la base del entendimiento de que la disociación entre el desarrollo de la ganadería y la deforestación requiere una adopción de la intensificación de la ganadería y un desarrollo de bajas emisiones de carbono.   Un conjunto de iniciativas está intentando establecer directrices, normas y proyectos piloto para respaldar esta intensificación de la ganadería, mientras que otro conjunto busca brindar los incentivos necesarios para que los productores adopten estos sistemas de producción.   La ampliación de la ganadería extensiva ha generado grandes áreas de pastura de baja productividad. Estas tierras son las principales candidatas para la intensificación de la pastura, por lo que diversas iniciativas han sido desarrolladas para ocuparse de ello. EMBRAPA ha propuesto dos modelos principales: 1) Sistemas silvoagropecuarios integrados y 2) El Programa de Buenas Prácticas para el manejo intensivo de pasturas. Además, diversas iniciativas piloto, como también otras promovidas por diversas ONG, están implementando sistemas intensivos en fincas experimentales con diferentes resultados.   Una consideración principal en la puesta en práctica de estos sistemas es el financiamiento. Los productores se ven limitados económicamente como para adoptar sistemas de producción mejorados. Para remediar esta situación, el gobierno brasileño ha desarrollado un importante plan de crédito para la financiación de la agricultura de bajas emisiones, denominado “Programa de Agricultura de Baixo Carbono” (ABC). Sin embargo, el alcance de este programa aún es limitado, y los productores enfrentan dificultades para cumplir con los requisitos, en especial, en lo relativo a la titulación de tierras. Además, los bancos comerciales se ven limitados, dado que enfrentan riesgos financieros y reputacionales relativamente altos para el financiamiento de actividades económicas en la Amazonía.     Desafíos para la ganadería sostenible   La ganadería sostenible en la Amazonía brasileña no puede limitarse solo a la reducción de la deforestación que está relacionada con la intensificación de los proveedores directos de las compañías cárnicas, las cuales son principalmente productoras a gran escala. Por el contrario, la ganadería sostenible debería apuntar a mejorar la tierra, la pastura y otros bienes económicos para alcanzar la reducción de la deforestación, al tiempo que se mejora el desempeño social, económico y ambiental de los sistemas de producción ganadera (es decir, la restauración de las responsabilidades ambientales).   Hasta el momento, la industria cárnica ha mantenido el compromiso con el gobierno de rastrear sus fuentes directas de abastecimiento, aunque se está tornando difícil controlar a los proveedores indirectos. En este sentido, mientras que los proveedores directos a gran escala cumplen con las más altas normas de producción, los proveedores indirectos, incluidos los proveedores a mediana escala y los pequeños productores, también deberían ajustarse a las mismas reglas de juego.   La Amazonía brasileña asimismo cuenta con un importante potencial para la producción de biomasa (mucho más elevado que otras regiones de Brasil); en especial, para la producción de forraje, granos, cultivos perennes y madera. Los modelos de producción técnica propuestos apuntan a maximizar la productividad de la tierra con costos relativamente altos de trabajo, equipamiento e insumos, además de ser muy demandantes en términos de conocimientos y calidad de trabajo. Por esta razón, estos modelos amenazan con aumentar el impacto ambiental causado por una utilización masiva de insumos químicos. Además, es probable que una gran cantidad de productores que cuentan con menos recursos no sea capaz de adoptar estos modelos productivos.   Por otra parte, la intensificación de los procesos tiende a ocurrir en tierras más fértiles y accesibles, las cuales no necesariamente se corresponden con las tierras degradadas que más precisan ser recuperadas. De hecho, las pasturas degradadas son las candidatas menos probables para pagar los costos y generar los beneficios económicos que demandan los sistemas de intensificación que en la actualidad se promueven. Al respecto, cabe mencionar que no se han investigado lo suficiente alternativas que puedan estar mejor adaptadas a las tierras degradadas y a las fincas más pequeñas y que aprovechen los recursos naturales disponibles en la región amazónica. Estas alternativas son más compatibles con el concepto de agroecología, en contraposición con los modelos de altos niveles de insumos.     Relación de la ganadería con la sostenibilidad territorial   Alcanzar la sostenibilidad en las fronteras agrícolas de la Amazonía brasileña requiere no solo acuerdos institucionales público‑privados dirigidos a hacer cumplir las leyes ambientales, sino también iniciativas y sistemas de retribución que faciliten la adopción de prácticas de producción mejoradas, alentando de este modo la transición desde sistemas de producción que influyen en forma negativa sobre los recursos naturales hacia sistemas que utilicen dichos recursos de manera más eficiente. Tres acciones complementarias podrían contribuir a alcanzar esta meta.   1. Desarrollo y puesta en práctica de tecnologías adaptadas

Centrarse en tecnologías con el potencial de utilizar mejor los recursos naturales existentes en la Amazonía (es decir, fertilidad del suelo, disponibilidad hídrica) en vez de utilizar grandes cantidades de químicos. Este enfoque tiene el potencial de apoyar a una gran cantidad de productores que disponen de menos recursos, en vez de apoyar a un grupo de ganaderos a gran escala bien capitalizados. Asimismo, este enfoque se encuentra adaptado a áreas extensas de tierras degradadas. Un aspecto fundamental que se debe considerar es la configuración espacial de estos sistemas a nivel del paisaje, la cual debe coincidir con la ubicación de los recursos naturales para construir paisajes ecoeficientes.   2. Implementación de un marco de monitoreo para empoderar a los actores locales   La determinación del progreso hacia el logro de la intensificación sostenible de la ganadería debe ser parte de un monitoreo territorial de desempeño más amplio; no solo para evaluar el progreso, sino también para identificar los factores que lo limitan. Las jurisdicciones capaces de medir el progreso en su desempeño para mostrar que están haciendo su parte en pos de la mejora de la sostenibilidad probablemente serán más atractivas para los inversores. Esto puede ayudar a priorizar las intervenciones públicas (es decir, regularización de la tierra, líneas de crédito público). Este proceso, sin embargo, requiere una importante acción colectiva.   3. Fomento de los arreglos institucionales que adopten enfoques territoriales   Los acuerdos públicos y privados para reducir la deforestación y lograr la intensificación sostenible de la ganadería deben ser concebidos como parte de los esfuerzos por mejorar el desempeño territorial en jurisdicciones subnacionales, como los municipios. Es a este nivel que el logro de la sostenibilidad (la inclusión social, los aumentos en la productividad y el mantenimiento de servicios ambientales) pueden ser mejor especificados. Además, los enfoques territoriales tienen el potencial de articular los esfuerzos de distintos actores y pueden generar alianzas para estimular innovaciones técnicas e institucionales y el aprendizaje mutuo.   Estas tres acciones —dirigidas a mejorar la adopción de tecnologías ecoeficientes adaptadas; el monitoreo y la certificación del progreso del desempeño territorial en pos de la sostenibilidad y la mejora de los arreglos institucionales para generar innovaciones y un aprendizaje mutuo— son los componentes de un enfoque dirigido a alcanzar la sostenibilidad ambiental en jurisdicciones específicas. Distintos actores ya se encuentran realizando esfuerzos en esta dirección y esperamos continuar rabajando juntos para hacer que la sostenibilidad territorial sea una realidad.   Fuente: forestsnews.cifor.org