Parece obvio, pero muchos ganaderos no comprenden que el número de terneros logrados por vientre entorado es el factor determinante para lograr rentabilidad en la cría. Es 5 a 10 veces más importante que peso al destete y calidad de res.

La tasa de extracción de la región suele no superar el 50 %, es decir, que de cada dos vacas una come todo el año unos 4.200 kg de materia seca (Equivalente a 6.600 mcal) sin producir nada.

¿Hace falta decir que un negocio así solo puede ser de subsistencia, en el mejor de los casos?

Repasemos algunos parámetros conocidos: la gestación del ternero requiere unos 285 días, el tiempo para que vuelva a ciclar la vaca (puerperio) 40 a 50 días, dependiendo de la edad y el estado nutricional. Por tanto, para volver a quedar preñada y dar otro ternero al año siguiente hay muy poco tiempo, y es imposible si su condición corporal no es buena.

Esto lleva a un tema de exclusiva discusión en Colombia: la monta estacional. Algunas personas dicen que allí no es necesaria porque hay pasto todo el año, cosa claramente inexacta donde existen estaciones secas. ¿Por qué debe estacionarse la monta?

1. Porque no hay ganadería eficiente sin ajustar la curva de demanda del rodeo a la oferta forrajera, si fuese necesario con dos temporadas de monta.

2. Porque la monta estacional permite destetar antes que empiece la estación seca y mejorar la condición de la madre –idealmente preñada– para superarla. Es casi imposible obtener un ternero por año con alimentación pastoril destetando terneros de más de 6 meses de edad, mucho más en condición de trópico, en donde los recursos son limitados y cada litro de leche cuesta mucho en energía.

3. Porque es casi imposible eliminar enfermedades venéreas en montas naturales continuas.

El viejo axioma de que la preñez entra por la boca sigue más vigente que nunca: la vaca que al momento del entore no presente una condición corporal mínima (5/6 en la escala 1 a 9, ver http://www.ipcva.com.ar/files/Brangus.jpg) tendrá bajas chances de preñarse.

Ningún tratamiento hormonal, ni con suplementos puede cambiarlo. El anestro no es en estos casos una enfermedad, es la adaptación de un mamífero a la falta de alimento.

Las vaquillas de primer parto son desde luego más sensibles, pues aún están creciendo. En esta categoría el destete lo más precoz posible es la única herramienta económica para que vuelvan a preñarse (Hablaremos sobre esto en la correspondiente nota). Es más rentable dar de comer a un ternero chico que convierte casi 4:1 el alimento, que intentar suplementar a su madre.

Desde el lado del factor macho, las cosas son más simples, toros jóvenes, aptos clínicamente, con adecuada circunferencia escrotal y tono testicular, libres de trichomoniasis y Campylobacteriosis. Es suficiente con 2 a 3%, hasta 4% en fincas muy complicadas.

Es importante que los recorredores vean trabajar a los toros, y en hatos grandes tratar de generar grupos sin dominancia (toros de edades similares).

La Inseminación artificial tradicional, o a tiempo fijo es una herramienta que de ninguna manera va a corregir los problemas derivados de la falta de condición corporal de las hembras. Estas técnicas reproductivas son útiles para mejorar la calidad genética, nunca para reemplazar manejo y nutrición. (ver esquema de la implementación de las montas en Argentina)

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Tips

• El factor más importante en cría es el % de terneros logrados
• No hay cría eficiente sin monta estacional, que adapta la demanda a la oferta forrajera.
• En rodeos sin enfermedades venéreas y con toros sanos, la condición corporal de la vaca determina el porcentaje de preñez.
• En condiciones de trópico los destetes mayores a 6 meses dificultan la recuperación de la madre, por ende habrá baja preñez.
• Toros jóvenes, sanos de buena circunferencia escrotal, usando un 3 a 4%.

**MV Martín García Fernández

Ing Agr Agustín García Fernández

SGF Consultora**