La 'nueva' tarjeta de crédito agropecuario, mecanismo con el cual el Gobierno pretende subsanar la crisis del sector productivo tiene poco de novedoso. Años atrás una tarjeta similar fue presentada y retirada poco tiempo después por su gran cantidad de falencias.

Hace algunos años, el país buscó darle solución a la crisis del sector agropecuario por medio de una tarjeta de crédito similar a la que el actual presidente de la República, Juan Manuel Santos, presentó como una solución innovadora.

Jorge Tarazona, exvicepresidente de crédito y fomento del extinguido Banco Ganadero y expresidente de la Bolsa Mercantil de Colombia, le explicó a CONtexto Ganadero que la tarjeta de crédito que se sacó al mercado en ese entonces no sirvió para subsanar las falencias del sector, y por el contrario generó una corrupción en el campo. (Lea: Campesinos, con tarjeta de crédito pero sin datáfonos para usarla)

“El experimento que se llevó a cabo en ese entonces, no cristalizó bien, pues le daban al agricultor una tarjeta y con esta el productor compraba unos puntos de fertilizante y se los vendía a sus vecinos. Entonces, este medio de pago se convirtió en un instrumento corrupto”, manifestó Tarazona.

Asimismo, el experto en temas crediticios para el campo aseveró que la actual tarjeta de crédito que el Estado, con apoyo completo del Banco Agrario, está brindándole a los campesinos, tiene la misma falencia que la trabajada hace algunos años.

“Quien está condenado a repetir la historia mala, la sigue viviendo. Todo lo que vivimos en años anteriores con las tarjetas de crédito para el sector agropecuario, daría lugar a que hoy se hiciera un estudio serio y profundo sobre cómo logramos que un usuario de este método de pago la maneje bien”, acotó el expresidente de la Bolsa Mercantil de Colombia.

Por su parte, Rafael Mejía López, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, SAC, agregó que esta solución plástica dada a los productores del campo en el país en años anteriores, debió ser un piloto para que la creación de la nueva tarjeta que se presentó este año. (Lea: Compra masiva de insumos para el campo necesita acciones concretas)

“Esta tarjeta fue un fracaso. Tanto que se volvió una venta de cupos crediticios. El actual Gobierno cree que nadie pensó nunca nada y ellos son los únicos que tienen todas las soluciones. Pero hace falta mirar mejor las soluciones”, culminó Mejía López.

De esta forma, queda entrevisto que las recientes soluciones para subsanar la crisis agropecuaria en el país se hicieron sin planeación, desconociendo el pasado y las consecuencias que esto podría traer.