La situación por la que actualmente atraviesan los azucareros se debe a las importaciones del producto, la tasa de cambio y la caída de los precios internacionales, los cuales afectan a más de 2 millones de trabajadores.
Para Luis Fernando Londoño Capurro, presidente de la Asociación de Cultivadores de Caña de Azúcar de Colombia, Asocaña, el hecho de que el Gobierno Nacional permita la importación de azúcar de baja calidad, resulta incomprensible, y más aun cuando no existen políticas de protección para el sector.
En entrevista con el diario El País de Cali, el dirigente gremial señaló que además de las importaciones de azúcar, otros factores como la tasa de cambio, que sigue por debajo de los $2 mil, y la caída del precio internacional, que pasó de US$30 centavos a US$17 centavos, está poniendo en riesgo la economía del sector. (Lea: Productores de caña piden control a las importaciones de azúcar)
Según el dirigente, Colombia es el país que más produce caña de azúcar en el mundo, pero con costos altos de producción y exportación. Es decir que el producto nacional, si se compara con países como Brasil, Cuba y Estados Unidos, no tiene las mismas ventajas con respecto a políticas arancelarias, de devaluación y de subsidio.
Por su parte, Guido Mauricio López, presidente de la Asociación de Productores de Caña, Procaña, dijo al diario informativo que en el país no solo hay 13 ingenios, “resulta que somos muchísimos más. Somos 2 mil 700 familias que producimos caña, y somos dueños del 75% del área sembrada”.
Lo que quiere decir que estas familias en 2 millones 400 mil hectáreas producen caña de azúcar, de las cuales 800 mil son destinadas a la exportación. “Tenemos excedentes de azúcar”, agregó López. Por esta razón, el dirigente gremial no se explica cómo el Gobierno autorizó la importación de 188 mil toneladas de azúcar en 2011 y otras 330 mil en lo que va del 2013, provenientes de Brasil y Bolivia.
Las peticiones del gremio
Con la actual crisis que atraviesa el sector, Asocaña, Cenicaña y Procaña le hicieron una solicitud a la Administración Nacional, con el fin de que se proteja el negocio productivo.
Estas peticiones se centraron en la definición de una franja andina de precios y aranceles para que haya un incremento del 25% del valor de las importaciones, y así tener estabilidad tanto en el sector cañicultor como panelero. (Lea: Productores de panela preocupados por importaciones de azúcar)
Otra petición es continuar con el apoyo al Fondo de Estabilización de Precios del Azúcar, Fepa, el cual le ha dado estabilidad al negocio durante 13 años. También insisten en el establecimiento de prohibiciones para las importaciones de azúcar.
Finalmente, el sector pide una política de devaluación monetaria, la cual debería estar cerca a los $2 mil 200, para hacercompetitivas las exportaciones.