logoHeader
gramínea Holcus lanatus

Foto: es.wikipedia.org

agricultura

Propiedades de la falsa poa en clima frío

por: CONtexto ganadero- 31 de Diciembre 1969

Esta es una gramínea versátil, con un alto potencial de adaptación en diversas condiciones agroecológicas, capaz de desarrollar raíces profundas o superficiales

Esta gramínea invernal puede permanecer en el verano, ya sea en forma de planta o en estado de semilla, dependiendo de dos factores clave: la disponibilidad de agua en el suelo y el manejo agrícola que se implemente. (Lea en CONtexto ganadero: Pasto Falsa Poa responde en cualquier clase de suelo)

Manuel Marco Martínez, ingeniero agrónomo, explica en una investigación que uno de los aspectos más destacados del holcus es su sistema radicular agresivo y altamente competitivo. Es capaz de desarrollar raíces profundas o superficiales, dependiendo de las condiciones del suelo, lo que permite adaptarse a una amplia variedad de suelos, incluso aquellos con bajos niveles de nutrientes.

Además, esta especie es tolerante a ciertos niveles de acidez, lo que la convierte en una opción viable para suelos que presentan condiciones desafiantes para otras gramíneas.

El holcus lanatus presenta un excelente potencial para la producción de forraje en invierno, con un valor nutritivo aceptable.

Aunque no es particularmente resistente a la defoliación intensa y frecuente, su capacidad de recuperación bajo condiciones de manejo adecuado lo hace idóneo para sistemas de pastoreo rotativo, especialmente en zonas de clima templado y suelos pobres en nutrientes.

De acuerdo con Marco Martínez, gracias a estas características, el holcus lanatus se presenta como una gramínea excelente para incorporarse en programas de mejoramiento extensivo, especialmente en suelos de diversa calidad y estructura, lo que convierte a esta especie en una herramienta valiosa para mejorar la producción forrajera en invierno.

Sin embargo, es fundamental destacar que esta gramínea debe sembrarse junto a una leguminosa para garantizar su éxito. Entre las opciones más recomendadas se encuentran especies del género lotus, que complementan el desarrollo del pasto lanudo.


Estrategias de producción y forraje

Una de las prácticas más comunes entre los productores es permitir que el holcus lanatus semille en primavera, creando un banco de semillas en el campo. No obstante, cuando la presencia de holcus es demasiado abundante y amenaza con ‘ahogar’ a la leguminosa acompañante, es recomendable no cerrar el potrero y continuar con el pastoreo.

Esta estrategia permite un balance adecuado entre ambas especies, garantizando la persistencia de las leguminosas en el sistema forrajero.

Según Marco Martínez, el pastoreo rotativo es el manejo recomendado para el holcus lanatus. Se debe pastorear el potrero hasta una altura de 2 cm y dejar que la planta recupere su crecimiento durante un período de 4 a 6 semanas, dependiendo de las condiciones climáticas.

Este tipo de manejo no solo favorece la producción de forraje, sino que también contribuye al desarrollo de un sistema radicular robusto, fundamental para la supervivencia de la planta en condiciones adversas de verano. (Lea en CONtexto ganadero: ¿Ha probado el pasto falsa poa? Conozca por qué sirve para cualquier suelo)