La propuesta pretende mejorar las condiciones de quienes habitan en la ruralidad nacional, para lo cual serán necesarios $3 billones anuales. Nutrición, educación, salud, vivienda, seguridad social y cuidado, los pilares de la iniciativa. En el marco de la presentación del Plan Semilla, que tuvo lugar en Pasto, el pasado miércoles 22 de abril, hubo un espacio en el que José Antonio Ocampo, líder de la Misión Rural, le entregó al presidente Juan Manuel Santos, la primera estrategia de las 5 que se comprometió a formular la entidad. (Lea: Mitos en torno al medio rural colombiano) La primera de las 5 iniciativas le apunta a disminuir las inmensas brechas que hay en materia de pobreza entre el campo y las ciudades, las cuales no permiten mejorar las condiciones de vida quienes residen en las áreas rurales y en donde hay considerables falencias, impidiéndoles tener una mejor calidad de vida. Ocampo hizo referencia a los datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, los cuales señalan que en 2014, un 41 % de la población rural presentó pobreza por ingresos y un 44 % pobreza multidimensional. En total, fueron 7 puntos más una propuesta transversal lo explicado por el jefe de la Misión Rural. Sobre esta última, aclaró que es necesaria la unificación de criterios y programas entre la Dirección Nacional de Planeación, el Departamento para la Prosperidad Social y los diversos Ministerios. “Es una estrategia que ayuda a organizar y evitar una multiplicación de criterios en las inversiones de los programas sociales”, sostuvo. (Lea: Minhacienda y Mincomercio tienen planes para el agro) -Nutrición: en las zonas más apartadas del país se deben consolidar unas estrategias de autoproducción para el consumo por parte de las familias, esos elementos van a permitir avanzar significativamente en el problema de desnutrición que existe en los habitantes más pobres del campo. -Educación: la estrategia se va a desarrollar en 3 fases. La primera es llevar el analfabetismo a cero lo más pronto posible, aspecto en el que hay complejos problemas, sin incluir el analfabetismo funcional que existe en el campo colombiano. Cobertura: en la ruralidad aún existen brechas enormes en comparación con las ciudades en materia de educación secundaria y terciaria. Infraestructura: es el acompañante de la estrategia. -Salud: es necesario que siga avanzando el plan del Gobierno y es la estrategia dual en materia de salud. Es decir, un modelo de demanda para las zonas urbanas, pero para el área rural una propuesta de oferta, que es distinto al que se propuso con la Ley 100. Eso significaría que el servicio debe buscar a la gente y no al contario. (Lea: “Al Gobierno le quedó grande generar políticas de Estado”, SAC) -Vivienda: hay 2 problemas básicos, la calidad de las casas es muy pobre en las zonas rurales y el déficit de acueductos, que representa una brecha enorme. Es necesario reformar la ley que estipula cuál es la asignación de recursos para vivienda rural y que esa entrega de dineros se haga en proporción al déficit. En el campo la entrega de dinero debe pasar del 20 % al 40 % para ese rubro. -Seguridad social: El problema la poca generación formal de empleo en las regiones rurales del país. Hay que diseñar un sistema paralelo que gradualmente converja para darles unos beneficios a los habitantes del campo. Es necesario hacer eso con quienes residen en la ruralidad, para que puedan llegar en un plazo prudente a una pensión universal que es un objetivo que se debe proponer el país. -Pilar de cuidado: Colombia ha tenido un avance significativo protegiendo a la niñez, pero el avance con el adulto mayor es prácticamente nulo. Es un tema que se va a volver cada vez más importante incluyendo las zonas rurales por cuenta del envejecimiento de la población del campo. Es fundamental desarrollar un sistema de cuidado para darle oportunidad a la mujer. Por lo que es un elemento indispensable para fomentar la equidad de género. (Lea: Fomentar crecimiento del agro, uno de los principales retos de Santos) “Los habitantes del campo deben ser capaces de ser productores eficientes y generar unos ingresos para sostenerse, que es uno de los grandes problemas. En la forma en la que se articulen los programas sociales con la generación de ingreso, las condiciones de quienes residen en la ruralidad mejorarán y se irán cerrando las brechas en ese aspecto”, remató Ocampo.