De este producto nada se pierde, todo se transforma: desde el agua, que sirve para hidratar el organismo, hasta la estopa, que contribuye a la fertilización de la tierra.
Expertos indican que todo aquello que proviene de la tierra debe volver a ella, con el fin de contribuir al desarrollo de la humanidad. Este es el caso del coco. Una fruta que es aprovechada en su totalidad, tanto para nutrir al organismo humano, como para mejorar la calidad del suelo.
Algunos dicen “de esta agua no beberé”, en referencia al líquido que de esta fruta se extrae. Pues bien, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, Usda (por sus siglas en inglés), indica que la fruta contiene pequeñas cantidades de minerales como el sodio y el potasio, que trabajan conjuntamente para mantener el nivel hídrico del organismo, el pH, la presión sanguínea y la transmisión de impulsos electroquímicos, evitando, entre otras cosas, los calambres. (Lea: Los pequeños productores de coco se profesionalizan en Brasil)
De acuerdo con el nutricionista Luis Escobar, el coco también aporta calcio, que interviene en la coagulación sanguínea, la contracción muscular, la función nerviosa y el crecimiento celular; magnesio, que permite la transmisión neuromuscular; y fósforo, que tiene una relación directa con la formación del esqueleto y de compuestos energéticos.
“Tiene más similitud al Aquarius que al agua. De hecho, para evitar confusiones y no invitar a su consumo como producto incoloro, inodoro, insípido y acalórico –algo que en realidad no es–, deberíamos llamarla Aquarius de coco”, señaló Escobar.
El nutricionista agregó que esa fruta también tiene altos contenidos de agua, está libre de colesterol y es baja en azúcar, aunque no está exenta por lo que aporta calorías (unas 19 por cada 100 gramos, menos que los zumos de frutas que rondan las 64). También contiene una pequeña cantidad de proteínas y fibra. Comparando contenidos nutricionales en las tablas que publica el Usda, no es muy diferente de un agua mineral con unas gotas de zumo de limón y una pizca de azúcar y sal.
Las otras virtudes del coco
La manteca que se extrae del fruto tiene virtudes antibacterianas y antivíricas aseguran acabar con la gripe o la hepatitis y, quizá, hasta el Alzheimer, según un estudio publicado en el Journal of Alzheimer’s Disease basado en resultados de laboratorio. (Lea: Eliminar aranceles no tiene validez si no se combate el contrabando)
Sobre esta característica de la fruta, Escobar indica que el ácido láurico que la dota de propiedades beneficiosas para la salud, le proporciona también alta potencia y densidad energética. Y su uso cosmético también tiene bastante que ver: suaviza y nutre el pelo y le aporta proteínas, hidrata la piel y trata infecciones dérmicas gracias a sus propiedades antifúngicas.
El ‘contra’ del coco
De acuerdo con el gerente de la Asociación Hortifrutícola de Colombia, Asohofrucol, Álvaro Ernesto Palacio Peláez, a pesar de que la fruta tiene muchas virtudes, en el país solo hay 5.000 hectáreas distribuidas en el Atlántico y Pacífico y que la mayor cantidad solo se encuentra en Tumaco, Nariño, con 1.000 hectáreas.
“Nosotros somos importadores de coco. El agua de coco, por ejemplo, si va a las grandes superficies el producto es traído de Brasil o de países asiáticos y tiene tratamientos industriales. La cáscara del coco, que lo denominamos estopa, la importamos desde Sri Lanka, y se usa como sustrato para los cultivos de flores, hortalizas y arroz”, indicó el dirigente gremial. (Lea: FAO pide que se generen nuevas políticas para el sector agroforestal)
La idea, según Palacio, es hablar con el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, para saber cómo se pueden empezar a cultivar 300 mil hectáreas de frutas en varias partes del país y así poder diversificar la producción con un sector comoel los arrocer, “esto es lo que el país necesita porque sí hay con qué”.