Según las directivas de Cenipalma la adopción de buenas prácticas agrícolas para incrementar los rendimientos de los cultivos y mejorar el gen de la palma de aceite son la base para obtener mejores productos en el país. Los avances se dieron a conocer en la XI reunión técnica nacional de palma de aceite.
Del 24 al 26 de septiembre en el Centro de Convenciones de Compensar, en Bogotá, los avances tecnológicos y la investigación en el sector palmicultor se dan a conocer en la XI reunión técnica nacional de palma de aceite. En la apertura de este evento uno de los temas centrales fue la adopción de las buenas prácticas agrícolas, las cuales son recomendadas y recordadas por las directivas de Cenipalma.
En el primer día de este evento, temas como la importancia de las buenas prácticas, el cambio climático y el tratamiento de enfermedades, fueron los ejes temáticos sobre los que se pidió atención a los miembros del sector palmicultor, a quienes también se les recordó lo importante de tomar conciencia acerca de la necesidad de mejorar la producción de la palma de aceite, esto para todos aquellos quienes participan en el proceso, tanto productores como científicos.
La adopción de buenas prácticas, imprescindible para la producción de palma
De acuerdo con José María Obregón Esguerra, vicepresidente de la junta directiva de Cenipalma, cuando la palma de aceite llegó al país, en la época de la colonización, se creía que esta era una maleza.
“El mundo cambió y hoy en día ningún agricultor puede hacer eso. El paquete tecnológico no es una novedad, se trata de aplicar prácticas como la preparación del vivero, de los suelos y el manejo adecuado y mantenimiento de la cosecha. Lo que pasa es que el agricultor colombiano se acostumbró a no hacerlo y estábamos haciendo un cultivo de maleza; es aplicar las técnicas básicas”. (Lea: Genoma de la palma de aceite, el futuro de los biocombustibles)
Cambio climático no puede ser la excusa para no mejorar
Hernán Mauricio Romero, coordinador del programa de Biología y Mejoramiento Genético de Cenipalma, aseguró que hace 8 años era imposible saber qué tipo de clima se iba a presentar en el país. Se pensaba que la sequía se iba a imponer por lo que el sector se preparó para saber qué hacer y de dónde iba a salir el agua.
“Cuando empezó a llover nos tocó irnos para el otro lado, entonces desde hace 2 años empezamos un programa fuerte para hacernos enemigos naturales de las enfermedades y vimos, por ejemplo, que con el uso de agroquímicos como los hongos se mejoraban aspectos como la resistencia de la palma. Hoy estamos validando esa información para poderla sacar al mercado”.
Tratamiento de enfermedades, un trabajo regional
Según Jorge Alonso Beltrán, jefe de Validación de Resultados y Transferencia de Tecnología de Cenipalma, en el sector existen muchas recomendaciones para atacar enfermedades como la pudrición del cogollo, la marchitez sorpresiva y el anillo rojo, pero sin la unión de los productores e investigadores, la productividad no tendría el crecimiento necesario para la producción de aceite. (Lea: Nuevas estrategias para mejorar la productividad de palma de aceite)
“Sin embargo para atacar cualquier enfermedad se necesita un trabajo de región, que se apliquen todas las tecnologías y ese es uno de los retos que tenemos: trabajar con todos los productores el tema de las recomendaciones en pudrición, como el uso de gramíneas. Tenemos la tecnología pero se necesita aplicarla a nivel regional”, apuntó Beltrán.
Bajo el lema “Palmicultura productiva con mejores prácticas agroindustriales” los más de 800 asistentes a esta XI versión también podrán participar en conferencias sobre temas en manejo de plagas y enfermedades, mejoramiento tecnológico, muestras comerciales y casos exitosos en manejo de cultivos.
“Este evento es el reflejo de la innovación de todos quienes trabajan en el sector palmero del país, que está conformado por los diferentes técnicos. La invitación es tanto a productores como personal especializado en la agroindustria. Es una oportunidad para el intercambio de experiencias, no solo en el cultivo de palma de aceite, sino en su procesamiento”, expresó José Ignacio Sanz, director ejecutivo Cenipalma.