Hace unos tres meses (abril) proliferó en la vereda La Verde, en el municipio de Cimitarra, Santander, la Hormiga Loca, la cual puede acabar con cultivos de maíz, cacao, plátano y frutos pequeños. Este insecto -Paratrechina fulva- es originario del sur de Brasil y fue introducida ilegalmente a Colombia como controlador de serpientes en explotaciones madereras de Puerto Boyacá. Posteriormente, en 1988, apareció en el municipio de Cimitarra, afectando cultivos de pasto, cacao, caña, maíz, plátano, yuca, café, guayaba y cítricos, y desde esa época esta hormiga ha venido afectando desde pequeños animales hasta ecosistemas enteros ocasionando daños a nivel agrícola y ganadero. Reconózcala Por su comportamiento desorganizado y por la velocidad de desplazamiento en todos los sentidos, los agricultores le han dado precisamente el nombre de "hormiga loca". Es un insecto pequeño, de color marrón, vive asociada en colonias o nidos, que son transitorios cuando los hacen bajo troncos pequeños, pedazos de madera, hojas secas, basuras, tejas, ladrillos, desechos de plástico, piedras de poco tamaño, etc., o nidos permanentes cuando los ubican en árboles y troncos grandes, debajo de rocas o entre láminas de pizarras arcillosas. (Lea: ICA: Manejo integrado de la hormiga loca) Dentro de su organización biológica habitual mantiene, como las demás hormigas, a las reinas, las cuales son las responsables de la reproducción. Estas se caracterizan por ser las más grandes con una longitud de hasta 8 mm y, además, poseen un abdomen sobresaliente. Los machos -que cumplen con la función de fecundar a las reinas- tienen alas y miden aproximadamente 3.5 mm. Las obreras tienen el mismo tamaño de los machos y son las encargadas de alimentar las colonias, su color es de castaño a canela. Como la gran mayoría de los insectos, la hormiga loca pasa por los estados de huevo, larva, pupa y adulto. El ciclo dc vida es de 45 días aproximadamente, con excepción dc las reinas, que duran mucho más, pues pueden vivir incluso más de seis meses en condiciones de laboratorio. Los daños que causa Puede ocasionar daños tanto al hombre, como a las plantas y a los animales. Cuando existen altas poblaciones se suben al cuerpo de las personas, causando intranquilidad y fastidio, lo cual los limita en sus labores de campo. En las casas se comen los alimentos preparados, en especial los que contienen grasas o azúcares. En las plantas, aunque estas no se alimentan directamente de las plantas, sí transporta y protege insectos chupadores como cochinillas, áfidos, pulgones, moscas blancas y escamas, siendo estos últimos los que le hacen daño directo a la planta al extraer o chupar la savia, causando amarillamiento generalizado. Además, crea un ambiente favorable para el desarrollo del hongo que da origen a una capa negra en las hojas, a manera de hollín (furnagina), que impide un normal funcionamiento de las plantas al dificultar su respiración y fotosíntesis y, en consecuencia, el cultivo presenta amarillamiento general, poco crecimiento y las hojas bajeras se tornan oscuras. En animales La hormiga loca invade los potreros, y ataca todas las especies domésticas y silvestres, tanto adultas como recién nacidas. En las zonas invadidas desaparecen hasta mamíferos, reptiles y aves. A los bovinos se les suben por las pezuñas, poniéndolos nerviosos e intranquilos y les impiden alimentarse normalmente. A los terneros de corta edad les producen daños en la jeta y la nariz, causándoles asfixia e incluso la muerte, y en ocasiones les atacan los ojos llevándoles a la pérdida en la visión si no se les atiende rápidamente. Al penetrar por las aberturas nasales causan daños irreparables a los Órganos. Cuando altas poblaciones de hormiga loca atacan especies menores, como cerdos, pavos, pollos, y patos, pueden llegar a producirles la muerte, especialmente a los animales recién nacidos. Fuente ICA