Se iniciará la segunda fase para la consolidación de las áreas de aislamiento de la enfermedad, con el propósito de detener el avance de la Pudrición del cogollo, PC, desde Puerto Wilches, en Santander; y Cantagallo, en el sur de Bolívar; hacia otros municipios palmeros del Magdalena Medio.
A través de un Convenio de Cooperación Técnica y Científica por valor de $5.023 millones, suscrito entre el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA; y la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma; se iniciará la segunda fase para la consolidación de las áreas de aislamiento de la enfermedad, con el propósito de detener el avance de la Pudrición del cogollo, PC, desde Puerto Wilches y Cantagallo hacia otros municipios palmeros del Magdalena Medio. (Lea: Fedepalma y el PTP capacitan a 1.000 palmicultores sobre la PC) La estrategia contempla la eliminación de palmas afectadas en lotes completos, palmas puntuales que se encuentran en áreas de avance y la de focos aislados, específicamente en Santander, sur del Cesar y sur de Bolívar. Las áreas en donde se llevarán dichas acciones serán determinadas por el ICA. Además de la eliminación de palmas enfermas, el convenio desarrollará acciones para la mitigación de la PC, el manejo de insectos plaga asociados a la eliminación y renovación de palma de aceite, verificará si las acciones previstas disminuyen la presión del inóculo causante de la PC, y dará continuidad a la campaña de comunicación del riesgo: “De la mano contra la PC”. Las gestiones de Fedepalma tuvieron eco en el Gobierno Nacional; sin embargo, Jens Mesa Dishington, presidente Ejecutivo del gremio, aclaró que “aunque el recurso asignado es importante para avanzar en la solución a la problemática económica de los productores de Puerto Wilches en Santander y Cantagallo en el sur de Bolívar, se requieren mayores esfuerzos presupuestales para sortear definitivamente esta crisis. (Lea: Lo que usted debe hacer para controlar la Pudrición del Cogollo) Para ello es urgente consolidar el Plan de Normalización, Reorganización y Reactivación, PNRR, propuesto por la Federación al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, y que busca favorecer a los palmicultores que lo han perdido todo por causa de la PC, y a la población que trabaja y deriva ingresos de la actividad palmera, no solo en la Zona Central, sino también en la Zona Suroccidental que igualmente ha sido gravemente afectada por esta emergencia fitosanitaria”. El PNRR permitiría, en Puerto Wilches y Cantagallo, erradicar las palmas enfermas de 23 mil 700 hectáreas y renovar 34 mil 700, beneficiando a los palmicultores con cultivos afectados por la emergencia de la PC. Se trata de una intervención integral en la cual participe el Gobierno Nacional, las entidades de financiamiento, los productores y el gremio. (Lea: 3 razones del difícil momento que vive el sector palmero) Es por esto que, como está previsto, en el PNRR todos ponen. Fedepalma estima una necesidad, durante los siguientes 3 años, de recursos públicos por $197 mil 400 millones y una contribución del sector privado por $408 mil 100 millones. La presencia de la PC en el Magdalena Medio ha afectado 37 mil 900 hectáreas de palma de aceite y ha ocasionado la crisis socioeconómica de la región, derivada, entre otras, de la pérdida de 11 mil empleos rurales directos e indirectos. “El deterioro económico que ha ocasionado la PC no se puede calcular solo por la afectación de las plantaciones; la grave situación que afronta la Zona Central palmera por cuenta de la PC nos reporta pérdidas que se estiman en $2,3 billones. No podemos permitir que la enfermedad avance poniendo en riesgo las zonas aledañas. De no frenar el avance de la enfermedad en la Zona Central, se ponen en riesgo 107 mil 500 hectáreas en áreas contiguas a la línea de avance y con ello, 33 mil 600 empleos”, puntualizó Mesa Dishington. (Lea: Palmicultores son amenazados de muerte por no sembrar coca) Los aportes al Convenio de Cooperación provienen de recursos asignados por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural por valor de $4.000 millones, mientras Fedepalma aportará $660 millones y el ICA $363 millones.