José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos, Fedegán, lamentó el presupuesto asignado para el sector agropecuario en 2017. Destacó que el monto va en contravía de la importancia que el propio Gobierno le ha atribuido de cara a un eventual posconflicto. Luego de que se diera a conocer la cifra de $1,662 billones para 2017, que dejó desconcertados a todos en el mismo Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, las reacciones no se hicieron esperar. Las voces coincidieron en haber quedado desconcertadas ante la falta de apoyo por parte del Gobierno y en cuestionar el papel real que se le va a dar al campo teniendo en cuenta que en varias oportunidades se ha expresado que será eje central de un eventual posconflicto con las Farc y otros grupos insurgentes. (Lea: Gremios rechazan reducción del presupuesto para el agro en 2016) “No entiende uno el criterio a la agenda que tiene el Gobierno nacional. Si había un momento para darle un rol protagónico al agro es este y con ese presupuesto queda claro que seguirá relegado a papeles secundarios y siempre supeditado a lo que quede luego de repartir recursos para los demás Ministerios”, señaló el dirigente gremial. En su concepto, esa cifra, que es similar a la que se asignó hace 10 años, es una muestra clara de la poca importancia que le concede el presidente Santos al campo, que bajo su administración ha tenido que ver una y otra vez como todo es más importante que el lugar del que depende la seguridad alimentaria del país.
Según Lafaurie Rivera, son este tipo de situaciones las que hacen que quienes conforman el sector rural sientan que solo son escuchados cuando hacen paros o movilizaciones, casi siempre pidiendo recursos que hubieran podido asignarse en el presupuesto. (INFORME: 26 paros en casi 6 años, el balance del Gobierno Santos) “Es una reducción sensible, de casi el 33 % y no hay forma de justificarlo, muchos menos cuando desde que en 2012 cuando iniciaron los diálogos de La Habana siempre usaron al campo como uno de los puntos de negociación y han prometido que lo convertirán en uno de los motores de desarrollo del país; sin embargo, siguen sin entender que no es solo asignar tierras, se requiere de inversión y trabajo para que realmente sea productivo”, argumentó. Aunque aún se desconoce la manera cómo se ejecutará el presupuesto y la manera en la que se articulará lo acordado con las Farc en La Habana, es evidente la preocupación por cuenta de la disminución. La disminución afecta de manera directa a las entidades adscritas a la cartera, pues tendrán que reevaluarse muchos de los programas que adelantan en la actualidad. De igual manera, será necesario revisar distintos proyectos que se encuentran en ejecución y los que se encontraban a la espera de esta confirmación para decidir su viabilidad. (Lea: Reforma Tributaria afectaría al sector agropecuario del país) El presidente de la Federación resaltó que las necesidades de los diferentes sectores son muy grandes y que las expectativas son siempre de un aumento, por lo que la cifra revelada no deja sino preocupaciones de cara a los proyectos de asistencia técnica, de fortalecimiento, de campañas de prevención, entre muchos otros frentes que tiene a su cargo el MinAgricultura, y que ahora tendrá que ver cómo hace lo mismo y más, con menos recursos disponibles.