Este 5 de diciembre se celebra el Día Mundial del Suelo, que este año tiene como lema de campaña ‘Detengamos la erosión del suelo, salvemos nuestro futuro’, para concientizar sobre la importancia de mantener ecosistemas saludables y el bienestar humano.
La Asamblea General de las Naciones Unidas designó esta fecha a finales de 2013 y el primer día que se conmemoró fue al año siguiente bajo el lema ‘Los suelos, cimiento para la agricultura familiar’. (Informe: Criterios para evaluar el estado y calidad del suelo en campo)
Con la campaña de 2019, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha puesto sobre la mesa los desafíos crecientes en la gestión del suelo y la necesidad de aumentar los cuidados a este vital recurso.
Por eso, ‘Detengamos la erosión del suelo, salvemos nuestro futuro’ es una iniciativa que alienta a los gobiernos, organizaciones, comunidades y personas de todo el mundo a que se comprometan a mejorar de manera proactiva la salud del suelo.
Según estimaciones de la FAO, el 95% de nuestros alimentos se produce directa o indirectamente en los suelos, y la disponibilidad de alimentos nutritivos y de buena calidad depende de su estado. (Lea: ¿Usted verifica el suelo de su predio con una tarjeta de evaluación?)
“Hay algunos productos con mayor capacidad de absorción y concentración de nutrientes claves para el desarrollo humano. Sin embargo, si no logramos que estos elementos estén disponibles en las plantas, a través de fertilización mineral balanceada, el alimento será pobre nutricionalmente”, señaló Miguel Amado, gerente de Agronomía de Yara.
El contenido nutricional de los alimentos está directamente relacionado con la preparación del suelo. Por ejemplo, el zinc es vital para tener niños más grandes y con mejor desarrollo cognitivo, por lo que se debe garantizar su consumo en mujeres embarazadas e infantes.
De igual modo, el hierro es determinante para combatir la anemia, que afecta a una buena parte de la población en los países de Latinoamérica y en Colombia, donde 6 de cada 100 mil niños y niñas menores de 5 años murieron a causa de deficiencias y anemias nutricionales.
Además, la FAO sostuvo que más de 820 millones de personas sufren hambre en el mundo, pero la seguridad alimentaria no solo es una cuestión de cantidad, sino también de calidad. (Lea: Mejorar la calidad del suelo puede disminuir calentamiento global)
“Si queremos tener una dieta saludable, debemos empezar por preguntarnos qué tan bien se nutren los cultivos. Los hombres y las mujeres que se dedican a la agricultura juegan un papel fundamental en la obtención de alimentos nutritivos y en el uso responsable de los suelos; de ellos depende que el suelo recupere elementos tan esenciales para la vida, como el fósforo, potasio, calcio, hierro y zinc, entre otros”, concluyó Amado.
Este 5 de diciembre el llamado es a tomar conciencia sobre la importancia de proteger de manera inmediata y urgente los suelos, y así poder aprovechar los beneficios de suelos sanos para una agricultura sostenible y responsable.