El nitrógeno nítrico es la manera en la que las plantas prefieren absorbe el nitrógeno, pues se hace de una forma más inmediata. Conozca cómo puede elaborarlo dentro de su finca, ahorrándose dinero en la compra de fertilizantes.

Al poseer carga negativa, el nitrógeno nítrico no se fija en las arcillas de la estructura del suelo, por lo cual se vital que se tengan pérdidas de nitrógeno. Alejandro Elizondo, explica en su canal de Youtube, que esta es una forma en que se puede ayudar a la reducción de algunos productos químicos como la urea, que al día de hoy se encuentra muy costosa. (Lea: Mentiras y verdades sobre el uso de la tierra en ganadería)

De acuerdo a este profesional, el nitrógeno nítrico se produce a través del proceso físico – químico de transformar los residuos de los cultivos anteriores, de tal forma que este nitrógeno se vuelve muy asimilable para las plantas.

Con los sobrantes de la cosecha de maíz, se pueden hacer grandes cosas, como producir nitrógeno asimilable para las plantas, de forma fácil y simple. 

En palabras de Elizondo, “todos los campesinos y agricultores, tenemos acceso a estos cinco elementos, ya sea de forma tecnificada o natural, pues la misma naturaleza nos lo puede proporcionar”.

El primer elemento para elaborar el nitrógeno nítrico es el rastrojo de cualquier cultivo, en este caso el profesional habla sobre el de maíz. El segundo elemento son los microorganismos, que pueden ser comprados en el mercado porque hay gran variedad de estos. (Lea: Residuos de arroz, maíz y gandul son buen complemento en la alimentación de bovinos de carne)

El tercer componente es la humedad, “pues si no tenemos forma de aplicar un riego o tener agua en nuestra tierras, este proceso lo vamos a hacer en el tiempo de lluvia”. Como cuarto elemento se debe utilizar una fuente de nitrógeno dependiendo el tipo de suelo que se tenga, una de las opciones es el sulfato de amonio, pues los microorganismos consumen gran cantidad de nitrógeno para hacer el nitrógeno orgánico.

“En el estudio de suelo que se llevó a cabo en mi tierra, los expertos me recomendaron que por cada tonelada de rastrojo, se debe usar 30 kilogramos de sulfato de amonio. Se tiene una regla muy básica y es que cuando se siembra maíz, lo que se cosecha de grano como por ejemplo si son 10 toneladas de gramos por hectárea, se debe producir aproximadamente 10 toneladas de rastrojos por hectárea, entonces en ese sentido se aplican 300 kilogramos de sulfato para descomponer las toneladas de rastrojo”, describe Elizondo.

El quinto elemento es el oxigeno, pues si se sepulta el material utilizado con el arado, ya no se puede cumplir con el proceso físico – químico de transformar la materia orgánica en nitrógeno asimilable para las plantas.

“Estos son cinco elementos sencillos con los que puede llevarse a cabo todo el proceso, teniendo en cuenta que con todos se cuenta en el predio. Por eso es importante no quemar los rastrojos, ni mover o golpeamos el suelo, se exponen al sol los microorganismos y estos mueren. Es por eso que se llama agricultura de conservación”, menciona Elizondo. (Lea: ¿Qué residuos de cosecha puede amonificar para ofrecer a su ganado?)