En las festividades navideñas los cielos del mundo se iluminan y llenan de color y sonido al estallar los juegos artificiales.
A muchos metros de distancia, solo el olfato nos reporta la polución que genera esa mixtura de nitratos, sulfatos y percloratos en fórmulas de sodio, cobre, estroncio, litio, antimonio, magnesio y aluminio, sin olvidar el bario, de isótopos radiactivos, que nos ofrece el color verde. (Lea: Así afecta la pólvora al ganado)
Neutralizantes, oxidantes y aglomerantes se mezclan en la pirotecnia, además del perclorato de sodio que da propulsión al cohete, los metales pesados que aportan el color y los aerosoles que producen la detonación.
Ya en los aires, esa mezcla libera, entre otros, monóxido de carbono (CO) y partículas suspendidas (PM2.5), y junto con las emisiones del transporte, fábricas, fogatas, calentones y quema de llantas o basura, genera, sobre todo los días 12 y 25 de diciembre, 1º. y 6 de enero, alta contaminación, escasa visibilidad y sensación de neblina.
Graves males respiratorios causan las PM2.5 al ser inhaladas y entrar directamente hasta el fondo pulmonar, previenen organismos de salud, y agregan que el CO, gas sin olor ni color, puede causar súbito malestar por envenenamiento, e incluso la muerte, mientras los metales impactan al sistema respiratorio. (Lea: Piden restringir uso de pólvora para evitar incendios)
A su vez, el perclorato de sodio que detona la cohetería cerca de los cuerpos de agua aumenta hasta un millar de veces los niveles normales y daña a microorganismos y fauna acuática.
Los animales, grandes perjudicados
La quema de pólvora masiva afecta considerablemente a la fauna doméstica y silvestre. Puede provocar muerte súbita, trastornos de hipertensión, problemas cardiacos, colapsos nerviosos y otras dificultades de salud.
En diálogo con la Universidad de Antioquia, el médico veterinario y docente de fauna silvestre de la Facultad de Ciencias Agrarias, Juan Gonzalo Ochoa Zuluaga, indicó que las detonaciones de pólvora causan estrés a la fauna doméstica y silvestre, la reacción ante este estrés puede ser distinta en los animales; algunos podrían sufrir infartos, abortos y reacciones nerviosas como salivar, llorar, aullar, volverse agresivos o correr. (Lea: Así afecta la pólvora al ganado)
“Para el caso de las aves, el abandono de sus nidos pone en riesgo a los pichones o que los huevos no eclosionen, además de posibles colisiones con vidrios o paredes (…) es probable que posterior a la alborada, en las zonas rurales de Medellín se afecte o altere la producción avícola o de leche, debido al estrés al que se exponen los animales, sin embargo, en Colombia, el departamento o la ciudad, no se han realizado estudios sobre el tema”, señaló Ochoa.